La Romana. Diversos  ciudadanos  han  reaccionado  alarmados por  el auge  galopante  que  va  tomando  la delincuencia  en todos los niveles  en esta  provincia,  donde  a cada  momento  se reportan  hechos  que  afectan  a todos  por igual.

En esta  ocasión  el arquitecto  Julio  Tolentino  mostró  su  descontento  por  la  situación  que  vive  La Romana.  Tildó de “mala” y “fallida práctica”, el traerles a La Romana generales que, según él, han fracasado en otras provincias del país, casi siempre del Cibao.

»En realidad, la maldita delincuencia nos come vivos a todos, en los tres municipios, con niveles delictivos nunca antes vistos”, expresó.

Dijo que los delincuentes son los verdaderos dueños de las calles, que La Romana ya no aguanta más. “Los hombres y mujeres serios y serias, somos más, somos los que sostenemos nuestras familias y el país y tenemos que vivir asustados y escondidos”, concluyó.

Pidió  al  general Virgilio Pacheco Garabito, que  cumpla y asuma su trabajo con eficiencia o de  contrario  que   renuncie, y  que  con  eso  le haría un bien al pueblo de  La Romana.

En  los municipios  de  La Romana Villa  Hermosa,  Guaymate,  y  los demás  distritos  municipales, se  viven momentos de mucha  tensión porque a eso se  agrega  la deficiencia  en  el  suministro  eléctrico con apagones  de  casi todas  las  noches  y  el  día   completo.

En  los  últimos días    en  La Romana  ha habido  diversos  hechos  de  muertes, algunas de esas muertes  producto de enfrentamientos  entre  policías  y  delincuentes  y  otros  casos  que  son  propios   de la   situación imperante  de  intranquilidad  que se   vive.

Ayer , una reputada  munícipe, ex presidenta  de la seccional del  Colegio  de  Abogados, la doctora  Luz del Carmen Pilier   fue  víctima  de los delincuentes  cuando  saliendo de su oficina  un hombre se le acerco y la obligo a entregarle  su  teléfono celular a la fuerza.

Las bancas de loterías  son asediadas por los  ladrones,  los asaltos  están a la orden del  dia por  doquier,  mientras  no se ve  una acción  policial  efectiva para  repeler  lo que  se   vive  en esta   ciudad  turística  al este del país.