Pobre….rica España

<STRONG>Pobre….rica España</STRONG>

JOSÉ ANTONIO MARTÍNEZ ROJAS
Parecería este encabezamiento una contradicción, pero no lo es. Hasta hace cinco lustros, España, junto a Portugal y Grecia eran considerados los países más pobres de una Europa floreciente después de haberse firmado el Tratado de Roma que creó la comunidad europea.  Sin embargo, el clima cálido y benigno de la Península Ibérica, atrajo el mayor número de turistas que visitan mundialmente un país después de Francia. Este flujo de visitantes hizo que la economía española creciese como la espuma de chocolate.

 Este año, la revista Time (Europa) dedicó una edición especial el 8 de marzo con el título: «Spain Rocks!» (España Surge). Este reportaje dedicado a realzar todos los avances, no sólo de la economía española, sino de todos los aspectos del resurgir español.  Afirmaba, que esta economía era la de mayor crecimiento entre los países de la Unión Europea, creciendo hasta ese entonces un 4% por año, cuando el promedio del resto de la comunidad apenas llega al 0.6%.  No obstante disminuir al 2.3% después de los atentados del 11 de marzo del año 2004,  todavía la brecha es más del doble.

La revista Time en este extenso trabajo, ubica a España como la octava economía mundial, indicando que está por encima de dos miembros del denominado Grupo 8 (G-8), la Federación de Rusia y el Canadá. Se pregunta el editor, entonces porqué no incluir a España cuyo Producto Interno Bruto es mayor que esos dos socios del G-8.

Los problemas de España comienzan con el rompecabezas que significan las diecisiete regiones autonómicas, cuyas fuerzas centrífugas y centrípetas amenazan con el país. La región vasca, la más radical y beligerante por tener la organización terrorista ETA, que acciona en toda España y en las provincias limítrofes con Francia, ha solicitado su separación y ha pedido en el parlamento europeo, que su idioma sea reconocido al mismo tiempo que el español o castellano.

 Asimismo, Cataluña con su xunta a la cabeza, también ha solicitado que el catalán sea admitido como idioma oficial en el Parlamento Europeo y ha ido más lejos, al declarar el catalán como idioma oficial de la región que reivindica. Las universidades han sido obligadas a ofrecer cursos de idioma catalán y se piensa, si ya no es un hecho, obligar a dichos centros de enseñanza, a que todas las cátedras sean dictadas en catalán. A nuestro parecer, un gravísimo error, ya que en esos centros estudian millares de estudiantes extranjeros a los cuales no les agrada en nada aprender un «idioma» regional.

Los gallegos, asturianos y valencianos no se han quedado atrás. También han solicitado al Parlamento Europeo, que sus dialectos sean también incluidos en los documentos que emite esa institución. 

 Observando este deprimente panorama, ya que entendemos que la grandeza de un país proviene en primer lugar de su unidad.  España en su conjunto es la 8va. potencia económica mundial, pero si le sustraemos el país vasco y la industrializada Cataluña, mal podría considerarse un poder económico global.

 Después de los atentados de la estación de Atocha en Madrid el 11 de marzo del año que discurre, los cuales hicieron perder el poder al Partido Popular de Aznar, responsable del auge económico de España, al parecer por la participación española en la ocupación de Irak, se ha filtrado que la organización terrorista conocida como Al-Qaeda que dirige Ozama bin Laden, dentro de sus reivindicaciones está incluida el retorno de España al islamismo, basado en los siete siglos de ocupación por los moros, hasta la expulsión de los mismos en su último reducto de Granada por los Reyes Católicos en 1492. Para estos extremistas, la antigua Hispania se denomina por el nombre de entonces Al Andalus o Sefarad.

 Observando este enervante panorama, ya que entendemos que la grandeza de un país estriba principalmente en su unidad, esto significa, que si las regiones autonómicas propician y eventualmente obtienen su separación, sobre todo el país vasco y la industrializada Cataluña, España no ocuparía ni remotamente el sitial de octava potencia económica mundial. Por todas estas razones es que hemos exclamado, ¡España eres muy grande, desunida, volverás a pobre! 

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