El vocero de la Policía Nacional, coronel Jacobo Mateo Moquete, dijo ayer que los hermanos Omar y Alex López Méndez, muertos por agentes de la institución, eran un “transporte seguro” para el envío de drogas a nivel regional, trabajo que dijo hacían por cuenta propia.

Explicó que los jóvenes estaban al servicio de bandas del narcotráfico, las cuales no especificó. Señaló que durante las investigaciones se estableció que además se dedicaban al sicariato en Santiago y Moca.

“Lamentablemente eran jóvenes muy violentos que estaban dedicados a todo lo relacionado al bajo mundo”, dijo Mateo Moquete.

Agregó que los hermanos López Méndez asaltaban personas en la vía pública para quitarles los vehículos, los cuales usaban por días y luego los vendían a personas que se dedican a desmantelarlos para vender las piezas.

Liberan mujeres. Mateo Moquete informó que fueron puestas en libertad a las dos mujeres que estaban con los hermanos López Méndez en la casa donde fueron abatidos por agentes policiales.

El vocero policial explicó que no se encontraron indicios de culpabilidad ni participación en los hechos que se les imputaban a los hermanos López Méndez.

Tampoco dio explicación del porqué las mujeres estaban en ese lugar.