LOS ANGELES. AP. La policía de Los Ángeles usó una orden judicial inválida y gastó 22.000 dólares para llevar a un asesino encarcelado y ex líder de una pandilla a que hablara en una cena exclusiva de ejecutivos, según un informe dado a conocer el viernes.  

En total, 38 empleados de la policía trabajaron unas 320 horas para preparar el evento realizado en enero en un edificio del centro de Los Ángeles y proteger a René “Boxer” Enríquez, escribió el inspector general de la comisión policial de la ciudad en el informe.

Lo que es más, la agencia policial no tenía la autoridad para sacar a Enríquez de la prisión porque usó una orden judicial de un caso de asesinato cerrado que sólo permitía su salida para declarar como testigo.

Enríquez, un ex líder de la pandilla Mafia Mexicana que ha estado en prisión desde 1993 cumpliendo una pena de entre 20 años y cadena perpetua, había hablado anteriormente para varios grupos de oficiales y suministrado información valiosa sobre la organización criminal transnacional a la que alguna vez perteneció, dijo el subjefe de policía de Los Ángeles, Michael Downing, en los días posteriores al evento.

El departamento emitió un breve comunicado el viernes en el que dijo que el jefe Charlie Beck había pedido a su oficina de estándares profesionales que lanzara su propia investigación. Beck ya había dicho que la participación del departamento en el evento fue un error.

El informe del inspector general reveló nuevos detalles sobre un evento que casi inmediatamente fueron criticados por el alcalde y por el presidente de la comisión policial.

De acuerdo con el texto, en diciembre un oficial de la policía de Los Ángeles describió el evento en cuestión como una sesión de capacitación policial cuando pidió a Beck el uso de recursos del departamento, lo cual hizo. Esos recursos incluirían tres visitas de agentes a Enríquez antes de su discurso, un helicóptero de la policía para vigilar el traslado, y oficiales del equipo SWAT que mantuvieran segura el área.

El evento atrajo a unas 175 personas invitadas por una sección de Young Presidents’ Organization, que se describe como “la red de ejecutivos y líderes de negocios más importante del mundo”. Cuatro oficiales de la policía de Los Ángeles asistieron, así como 10 “ejecutivos de alto nivel” de otras agencias del orden.

La presentación tuvo toques de teatralidad.

“Detrás de un pantalla que dejaba ver su silueta, Enríquez describió cómo una organización crea, produce y acumula valor económica, social y culturalmente”, se afirma en el texto. “No fue sino hasta que la cortina se levantó que la audiencia vio a Enríquez en un pequeño estrado, vestido con traje formal y con grilletes en manos y piernas”.

Una vez que le quitaron los grilletes, explicó quién era y cómo operaba la Mafia Mexicana.

Después del discurso, los invitados gozaron de una cena bufet. Se les permitió reunirse con Enríquez en pares, y éste firmó ejemplares de un libro sobre su vida publicado en 2009.