La seguridad ciudadana es uno de los aspectos más importantes para la convivencia social y el más apreciado por las personas en su arraigo hacia el lugar donde vive.
La seguridad ciudadana es fundamental para que exista cohesión social y a su vez gobernabilidad. La inseguridad ciudadana se está apoderando de la sociedad dominicana en las ciudades principales, Santo Domingo y Santiago.
Una de las causas de la inseguridad, además del auge de la delincuencia es la desconfianza que siente nuestra gente en los organismos policiales y la DNCD como se plasma en las últimas encuestas de la GALLUP y del Latinobarómetro, con porcentajes de desconfianza que superan el 65%.
Otro estudio que muestra la desconfianza en la policía nacional es Política social: derechos y capacidades realizado por ODH-PNUD en el 2010. Se identifica una gran inseguridad y desconfianza tanto de personas de los estratos medios como de los estratos pobres y se ilustra en citas como la siguiente: Yo no le tengo miedo a los tigueres, sí a la policía y a la DNCD, esa gente pueden matarle un hijo a uno en cualquier momento.
Los principales factores que provocan esa desconfianza en los organismos policiales son:
1. Los vínculos entre la policía nacional y las redes delictivas.
2. El incremento de muertes de transeúntes en los llamados operativos que realiza la policía nacional.
3. Los continuos asesinatos o ajusticiamientos ocultados en la categoría de intercambios de disparos.
A pesar de las denuncias internacionales y nacionales sobre los intercambios de disparos y su carácter violatorio a los derechos humanos como se plantea en el informe de Amnistía Internacional y del Departamento de Estado de los EEUU, estos siguen ejecutándose.
4. Ejercicio de torturas hacia personas encarceladas. El uso de las torturas en las cárceles y destacamentos es común como bien lo plantea la Comisión de Derechos Humanos y muchas personas en distintas comunidades que visitamos en diferentes estudios.
Todo este ejercicio de violencia, represión y violación de los derechos de las personas ha ido creando un clima de miedo y de inseguridad en la ciudadanía hacia el organismo que debe generar seguridad, la policía nacional.
La policía nacional debe transformar su lógica represiva y violenta hacia una relación pacífica y de protección hacia la ciudadanía.
El jefe de la policía ha planteado en varios momentos que la delincuencia amenaza con la gobernabilidad y la democracia, ¿No será la policía nacional la que amenaza la gobernabilidad y la democracia con su atentado permanente hacia la vida, la integridad de la ciudadanía y el ejercicio de sus derechos?