Politécnico Loyola: 57 años de  labor educativa interrumpida

Politécnico Loyola: 57 años de  labor educativa interrumpida

Al arribar hoy a sus 57 años de existencia, el Instituto Politécnico Loyola (IPL)  ha logrado honrar el ideal de sus fundadores al convertirse en  “una gran ciudad técnica y agrícola” que acoge en sus aulas más de 6,000 estudiantes de educación básica, media y superior.

  Además, el centro educativo ha fortalecido su oferta extra-curricular, con la escuela de inglés, los programas de educación continuada, el proyecto Infotep-Loyola y el programa de capacitación para sordomudos.

  Al participar en La Esquina Joven de HOY, el rector de la academia, padre jesuita Francisco Escolástico,  detalló con satisfacción los logros alcanzados hasta la fecha. Estuvo acompañado del vice-rector académico, Marino Brito; el decano de  Estudiantes, padre José Ramón López;  la directora de Gestión de Talento Humano, Indra Rosario y la directora del Departamento de Ingeniería, Savioli Paredes.

Además, el director de Relaciones Públicas, Víctor Martínez; la directora de Proyectos, Cindy Núñez y Cristian Espinal, del Departamento de Pastoral.

Según manifestaron los directivos de la institución, Loyola trata de conjugar en su oferta curricular la sólida formación académica de sus alumnos con los valores morales y espirituales. A esto se agregan, las actividades culturales, deportivas y recreativas que organizan  periódicamente.

Presupuesto. El IPL ahora  Instituto Especializado de Estudios Superiores Loyola apenas recibe del Gobierno una subvención mensual de 6.7 millones de pesos mensuales, lo que resulta insuficiente para el pago de nómina, mantenimiento de la estructura física,  electricidad y  subsidio estudiantil, entre otros gastos. “Este presupuesto apenas alcanza para cubrir un 60 por ciento de las necesidades básicas.  El otro 40 por ciento es costeado con el aporte de los alumnos”, enfatizó Escolástico. En ese sentido, demandó del Gobierno elevar a diez millones de pesos la asignación mensual.

Subsidio a estudiantes.  Por otro lado, al referirse a las ventajas de estudiar en Loyola, el padre Escolástico precisó que esta academia es una de las más económicas del país. “Un estudiante de bachillerato paga en Loyola RD$3,000  de matriculación al año, es decir RD$300 mensuales. Sin embargo, capacitar, por ejemplo, a un estudiante en Electrónica Industrial mención Comunicación cuesta a la institución  alrededor de RD$73,000, es decir que todos nuestros estudiantes  son relativamente becados, ya que  la escuela debe aportar RD$70,000 por cada uno”, explicó.

Inseguridad.  La  falta de seguridad en los alrededores de Loyola es uno de los grandes problemas con los cuales tienen que lidiar sus autoridades.

De hecho, varios alumnos han sido víctimas de robos y asaltos, manifestaron.   Y es que el perímetro de  este centro educativo comprende más de 130 mil metros cuadrados.

En sus 57 años de existencia, más de 20,000 jóvenes han egresado de las aulas del IPL.

Este centro  cuenta con  un programa de pasantía a través del cual facilita la inserción laboral de sus estudiantes.

Los protagonistas

Hugo Rivera

Primero pretécnico

Los profesores son excelentes y la  metodología de enseñanza que se implementa nos permite poner en práctica en los laboratorios y talleres los conocimientos teóricos ”.

Yalitza López

Primero técnico (3ero bachillerato)

Me traslado  desde Baní a  San Cristóbal para recibir mis clases. En principio  no me gustaba porque me asignaban muchas tareas, luego entendí que el objetivo era que yo aprendiera”.

Marionel Puello

Estudiante de electrónica digital

El estudiante de Loyola se caracteriza por su integridad, responsabilidad y disciplina, al desarrollar concomitantemente los valores morales con la formación académica, los deportes y las artes”.

Hegal Nansen

Electrónica Digital

Resido en Santo Domingo y decidí estudiar en Loyola porque es una institución que forma verdaderos profesionales y te ayuda a crecer en todos los ámbitos y renglones de tu vida”.

Las claves

1.  Aniversario

Como parte de las  actividades programadas para el 57  aniversario del IPL, están  la  51 va. graduación, en la cual serán investidos hoy sábado a las 7:00 de la noche, 244 nuevos técnicos en distintas áreas, mientras que el domingo se efectuarán varias actividades en honor a los egresados, comenzando con una misa a las 11:00 de la mañana.  El lunes 26, a las 5 de la tarde, será  puesta en circulación  la revista del 57 aniversario de Loyola y a las  7:00 de la noche  la exhibición de pintura de arte taíno, en el Auditorio Menor.

  2.  Graduación

La academia que desde enero de este año se convirtió en una universidad tecnológica, graduará  37 nuevos técnicos en Combustión Interna, 24 en Agronomía, 35 en Electricidad Industrial, mención comunicación y 42 en Electrónica Digital. Igualmente recibirán sus  títulos 43 bachilleres   en Mecánica Industrial mención mantenimiento, 39 en Electricidad Industrial, 14 en Metalmecánica, mención mantenimiento y otros 9 del programa  Infotep-Loyola que se graduarán en mantenimiento de máquina y herramienta.

3. Otras actividades

Como parte de la semana aniversaria, también se tiene previsto realizar el día  29, el lanzamiento de la Planificación Estratégica 2009-2012 del IPL, en el Auditorio Menor del Loyola. Del 26 al 30 de este mes en horario de la tarde,  se realizarán intercambios deportivos intercolegiales e intercursos, en la cancha de la institución.  En tanto, para el día 27,  a las 6:30 de la tarde, se presentará  una minirevista musical.  Se tiene previsto efectuar el primer  Rally Educativo.

4.  Matriculados 

De los más de 6,000 estudiantes  que tiene Loyola; 1,800 son de la escuela Básica Padre  Silvio González; 1,266 del bachillerato técnico; 713 en la universidad; 430 en el programa Infotep-Loyola; 1,400 en la Escuela de Idiomas y 476 en Educación Continuada.

Décima

Juan María del Orbe

Somos ricos en ideas

pero pobres en acción

y  con esta reflexión

queremos que hoy se vea

que la juventud desea

nunca quedarse en la cola

y es por ello que se inmola

con ansias y sentimientos

en pos del conocimiento

que siempre encuentra en Loyola.

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