La participación  del Presidente de la República en la campaña para las elecciones de medio tiempo, ha sido criticada y rechazada por distintos grupos.

La prensa reseña que el doctor Leonel Fernández participa con mayor despliegue propagandístico que los propios candidatos a puestos congresuales y municipales.

Junto a él y debido a su participación se mueve mayor cantidad  recursos del Estado: personas, vehículos, dietas, combustibles, se emplean militares para tareas de distribución de alimentos y dádivas.

En Colombia, la Corte Constitucional prohibió que el Presidente Uribe se repostulara para un tercer período consecutivo, lo que lamentó el mandatario dominicano. Funcionarios criollos piden la re- postulación del doctor Fernández aunque se le retuerza el pescuezo a la nueva Constitución, hecha como un flux a su medida. Se cuestiona la legalidad, la prudencia, la conveniencia de la participación del doctor Fernández en la campaña; se reclama que se coloque en posición de árbitro. Quizá se pide que produzca batata un esqueje de yuca al reclamar la no participación del Presidente Fernández quien también es un dirigente político, como recordó el Arzobispo Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez. En medio de las diferentes opiniones, mueve a reflexión esa declaración de Cardenal López Rodríguez sobre la participación del Presidente Fernández en visitas, desfiles y caravanas en los que respalda candidatos de su Partido de la Liberación Dominicana al Congreso y a los Municipios, en lo que se entiende como un adelanto a su campaña en busca de la reelección. La iglesia Católica juega un papel protagónico desde el descubrimiento de América y en países como el nuestro, aislado por el mar y muchas veces alejado de las corrientes civilizadoras, su acción forma parte importante en los juegos del poder.De ahí que ante esa declaración es preciso reflexionar, pensar, analizar y llegar a conclusiones que pueden o no estar equivocadas, ello, porque todos, todos los humanos somos perfectibles. Es cierto que el doctor Fernández es un dirigente político importante y que en su condición de tal fue postulado y obtuvo la Presidencia de la República, pero las expresiones de Su Eminencia pueden ser interpretadas como un respaldo a las posiciones políticas del actual titular del Poder Ejecutivo.

La iglesia católica pisa descalza sobre vidrio roto, o entre ardientes brasas, cuando interviene en cuestiones propias del poder temporal.

Se entiende que su papel, como pastora de almas, es defender la sociedad si se quebranta el ejercicio de los derechos humanos, la libertad, la democracia, de lo contrario puede conducir a conclusiones desagradables y falsas. Respeto el derecho a opinar de Su Eminencia pero en este caso no comparto con él.