PEDRO GERMOSÉN
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Varios sociólogos, politólogos, abogados y otros profesionales de las ciencias sociales dijeron ayer que los problemas de ética, moral e irresponsabilidad de los partidos políticos se encuentran en un estadio crítico, pero mostraron divergencias respecto a si el problema los conducirá a su disolución o sustitución por otras élites representativas de la sociedad.

Sobre el tema, debatido en el Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio, expusieron Francisco Checo, coordinador general de Participación Ciudadana; Francisco Cueto, director de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) en la República Dominicana; el reverendo Mario Serrano, director del Centro de Estudios Sociales Padre Juan Montalvo; Eduardo Jorge Prats y Enmanuel Castillo.

Checo dijo que la situación de las élites políticas es preocupante al punto de que los analistas señalan que se está a la puerta de una grave crisis de los partidos, como ha ocurrido en otras naciones.

Expresó que el problema se genera porque las organizaciones políticas se han sustentado en el clientelismo hacia los pobres y, en alguna medida, hacia la clase media, que utilizan los partidos como un vehículo de movilidad social.

Afirmó que tal y como planteó el licenciado Castillo, esa situación tiene que cambiar y, si no, los partidos tradicionales, los que han ocupado el poder y sus satélites, serán sustituidos.

Señaló que esos satélites cambian su favor a uno u otro partido mayoritario sin ningún criterio, ya que en una coyuntura están con uno y, en otra, respaldan a otro sin tomar en cuenta las bases programáticas.

Checo lamentó que en cada una de esas adhesiones los dirigentes de las organizaciones minoritarias que fungen como satélites sólo procuren nombramientos.

Dijo que la población más crítica, con más conciencia ciudadana, está observando este manejo oportunista, por lo que tarde o temprano la población rechazará ese accionar.

Por su lado, Cueto, de la FLACSO, no cree que los partidos vayan a colapsar y planteó que el gran reto es cómo fortalecerlos institucional y éticamente para que presten un mejor servicio a la democracia.

Expresó que los partidos adolecen de una gran debilidad interna, pero cuentan con gran capacidad para la movilización social.

Señaló que el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) hizo la transición interna de relevar el liderazgo del profesor Juan Bosch en el presidente Leonel Fernández.

Dijo que, por su lado, el ex presidente Hipólito Mejía fue el líder coyuntural del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), pero señaló que la sociedad le quedó grande al ex mandatario, quien, sostuvo, le hizo daño a su partido.

Manifestó que el país no está a la puerta de un colapso de los partidos, los cuales tienen una gran capacidad de adaptación.

No creo que estemos a la puerta de un colapso de los partidos políticos, subrayó Cueto.

Por su lado, Jorge Prats dijo que los dominicanos no constituyen una sociedad que se caracterice por la búsqueda de la ostentación.

Expresó Jorge Prats que de lo que se trata es de que cada quien procura ser socio de la gran empresa que es la República Dominicana.

Tras señalar que el clientelismo se produjo hasta en los Estados Unidos hasta la década de 1960, el abogado y politólogo dijo que el reto es superar esas taras a fin de trabajar, mediante un pacto, por el progreso y el bienestar de todos.