Doña Carmen Mazara, viuda del emblemático dirigente de izquierda Maximiliano Gómez (El Moreno), asesinado en Bruselas-Bélgica por los tentáculos del imperialismo, está en estos momentos librando una batalla por la vida tras contraer el coronavirus.

De carácter fuerte, recia personalidad y todo el valor del mundo, Carmen Mazara se convirtió en el régimen de los doce años del Dr. Balaguer en un verdadero símbolo de la lucha por la libertad y la democracia del pueblo dominicano.

Decenas de veces se le escapó a la muerte en ese funesto período, y nunca ha pasado factura por sus grandes servicios a la patria, manteniendo en los últimos años una especie de bajo perfil, dedicada casi exclusivamente a darle amor y apoyo a su familia.

De su relación con Maximiliano Gómez tuvo dos hijos, Guido y Fabricio Gómez Mazara, el primero un dirigente de grandes luces y muy aguerrido que heredó el valor y el patriotismo de sus padres, y el segundo un brillante profesional de la economía, una tercera hija es Marinelle Mendoza Mazara.

Todos estamos orando por la recuperación de esta insigne luchadora, excelente dama, víctima de esta apocalíptica pandemia, que no respeta ideología, posición social, credo religioso, como el caso del obispo de Higüey y otros líderes cristianos contagiados por la epidemia, situación que une las almas y los espíritus de la humanidad en una reflexión colectiva.

Doña Carmen Mazara ha salido airosa en muchas batallas, tenemos la fe y esperanza de que con la ayuda de Dios, el equipo médico que la asiste, logre vencer este diabólico virus, porque ella tiene todavía muchas razones para vivir con su bella familia, hijos, nietos, amigos y todo un país que la venera, quiere y admira.