POR MARÍA MERCEDES  
NIGUA, SAN CRISTÓBAL. Una mañana bastante calurosa nos acompañó durante todo el viaje, que sin intención de exagerar fue muy interesante y educativo, porque quienes tuvieron la oportunidad de asistir descubrieron un gran tesoro escondido que guarda esta tierra primada de América.

La visita fue a los ingenios coloniales de Engombe y Boca de Nigua, en San Cristóbal, que contó con la presencia de Sulamita Puig de González, subsecretaria de Cultura para el área de Patrimonio Cultural; el nuncio apostólico Timothy Broglio; el embajador de Estados Unidos, Hans Hertell y la directora de Relaciones Internacionales de la Secretaría de Turismo, Taty Olmos.

Manuel Del Monte Urraca, director de Patrimonio Monumental, anfitrión y guía, expresó que esa ruta fue dedicada a la embajadora de España, María Jesús Figa López-Palop por la colaboración que en el transcurso de su gestión ofreció a los proyectos presentados por esa dependencia estatal.

Cabe destacar que María Jesús Figa López-Palop, quien próximamente culmina su misión diplomática en República Dominicana, no pudo asistir debido a la parada técnica que haría en el país el presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero.

No obstante, Manuel Del Monte Urraca significó que al cesar sus funciones, la Embajadora deja estrechos nexos personales e institucionales, debido a su reconocida entrega a proyectos que favorecen a la comunidad. Su esposo Juan María Alzina, quien es embajador de España en Ecuador, estuvo presente en su representación.

Marcia Corporán, decana de la Facultad de Agronomía y veterinaria de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), recibió a los invitados en el ingenio de Engombe, ubicado dentro de la finca experimental del mismo nombre a cargo de esa casa de estudios superiores.

Una vez en el ingenio de Engombe y de Boca de Nigua, Manuel Del Monte Urraca se refirió al valor histórico de esas ruinas que forman parte de la “Ruta de los Ingenios”, nominada para ser declarada en junio de este año como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Destacó que los ingenios coloniales del país pertenecientes al siglo XVI son únicos en América y su valor histórico-cultural es tal, que propuso que ambas ruinas sean convertidas en “resort” de salud, –que no los hay en el país– lo que a su entender generará divisas provenientes del turismo.

“El ingenio de Engombe es uno de los primeros que se levantó en América, afortunadamente tenemos esta pequeña estructura que la llamo un pequeño alcázar, la capilla y un balcón que está en condiciones de ser restaurado”, dijo el director de Patrimonio Monumental.

Indicó que la meta es convertir ese espacio colonial que pertenece a la UASD en un atractivo turístico de primera categoría. “Hemos pensado que aquí se puede instalar un resort de salud, que todavía no existe en el país, es decir, en un lugar para personas que sean sometidas a una operación y en su proceso post-operatorio podrían venir a descansar. Este lugar tendría spa, sauna, mini golf, piscina, jacuzzi y baños con diferentes aguas; y el palacio podría ser un lugar de lectura, de Internet, donde el turista se recrearía, mientras el camarero le sirve un refresco”.    

Durante el recorrido, los presentes se mostraron muy interesados en conocer la historia de esos ingenios que tanto aportaron a la economía de la isla en la época de la Colonia.  

DATO

En octubre del año pasado, el arqueólogo Donald G. Jones, director de Programas de Icomos, Estados Unidos, fue el comisionado de la UNESCO que evaluó el proyecto de declaratoria de “La ruta de los ingenios azucareros coloniales del siglo XVI”, que este año serán proclamados Patrimonio de la Humanidad.