Hoy 
Todos han escuchado alguna vez que comer zanahorias mejora la vista. Muchos las mastican con fruición para calmar ataques de hambre sin incorporar demasiadas calorías. Otros confían en su poder de acelerar el bronceado y las devoran en cantidad cuando el clima primaveral obliga a descubrir la blanca piel que la ropa oculta. Su valor nutritivo, su contextura crujiente y su sabor dulce convierten a las deliciosas raíces de estas plantas umbelíferas en una de las hortalizas más populares.
Origen
Las primeras zanahorias, de color morado, crecieron en el actual territorio de Afganistán. Desde allí se propagaron por las costas del Mediterráneo y se extendieron por Europa. En Holanda y las regiones aledañas surgieron las de color anaranjado que predominan en nuestros días. En Oriente Medio, Turquía, la India y China hay variedades moradas, amarillas y rojas.
Consumo
¿Resulta más saludable crudas o cocidas? La cuestión ha sido motivo de controversia. La zanahoria cruda contiene nutrientes en mayor cantidad, pero la cocción permite que el organismo los aproveche mejor. En procura de un balance beneficioso, conviene alternar ambas formas de consumo y saborear las zanahorias en ensaladas, platillos frescos, sopas, guisos y guarniciones.
Las zanahorias se destacan por su aporte de betacarotenes, vitamina A y fitonutrientes. Los betacarotenos, responsables de su color anaranjado, son convertidos por el organismo en vitamina A, imprescindibles para numerosas funciones vitales del organismo.
Los fitonutrientes son compuestos naturales que protegen contra las enfermedades y tienen propiedades antibacteriales. Además constituyen una fuente de vitaminas E, C y varias del grupo B, entre ellas tiamina o B1, piridoxina o B6 y ácido fólico o B9. Ricas en minerales como potasio, cobre, hierro, magnesio y calcio, también proveen dosis significativas de fibra soluble.
Cordero con zanahorias glaseadas
Ingredientes:
1 kg de lomo de cordero
3 o 4 puerros
Sal y pimienta
600 g de zanahorias baby
1 taza de caldo casero de verduras
4 cucharadas de azúcar
Preparación:
Retire toda la grasa visible que pudiera tener el lomo de cordero. Atravesarlo de un extremo al otro, en su parte central, con un cuchillo largo, fino y filoso. Quite la parte verde de los puerros. Insertarlos en el corte del lomo, uno a continuación del otro, hasta completar el largo de la pieza. Sazonar con sal y pimienta.
Precalentar el horno a temperatura máximo. Disponer el lomo sobre una bandeja, sin materia grasa y cocinarlo aproximadamente 20 minutos.
Mientras, colocar las zanahorias en una ollita, verter el caldo y llevar al fuego. Cuando empiecen a ablandarse, agregar el azúcar. Completar la cocción de 5 a 10 minutos más.
