Las legumbres constituyen un alimento fundamental en nuestra dieta. Estamos cayendo en un error de no contar con ellas en la elaboración de nuestros menús.
Itziar Digón, nutrióloga de Madrid, señala que normalmente no tenemos tiempo y preferimos comer un sandwich y al llegar a casa en la noche, tampoco la tenemos como una opción, porque no la consideramos como un plato nocturno.
Hagamos un esfuerzo, porque las legumbres son una de las mejores fuentes de proteína vegetal que nos ofrece la naturaleza, aconseja la experta en nutrición. Estas, dice, tienen numerosas ventajas que no podemos pasar por alto: se comen con cuchara. Y la ventaja de los platos con cuchara es que se comen calientes y nos reconfortan; además si lo comemos como plato único se convierten en un plato muy completo e hipocalórico. Tienen ventajas frente a las proteínas animales, como por ejemplo la carne de cerdo, porque sus aminoácidos son de más fácil digestión.
La riqueza en proteínas y ácidos nucleicos de las legumbres está considerada como el antídoto natural contra el envejecimiento, al ser capaz de renovar de nuestro cuerpo, explica.
Si no hay tiempo de comerlas diariamente, la nutrióloga aconseja que hay que hacer un esfuerzo por consumirlas, por lo menos durante el fin de semana o hacerlas puré, para cenar.