Las cadenas de suministro globales están congestionadas. Y en California, Estados Unidos, esto es evidente.
Un número récord de buques que transportan contenedores hacen fila frente a los puertos principales de uno de los estados más ricos del país.
«Nos enfrentamos a un aumento de carga sin precedentes en los puertos de Long Beach y Los Ángeles debido a los grandes cambios de producción de la pandemia mundial y los desafíos de décadas en la cadena de suministro», dice el alcalde de Long Beach, California.
¿Qué está causando los atascos?
¿Qué tan grave es la congestión?
Las imágenes satelitales sobre los puertos de Long Beach y Los Ángeles muestran un enjambre de barcos inactivos, esperando descargar la mercadería.
Son buques que llevan contenedores con mercancías de casi todo lo que pueda imaginarse -desde juguetes hasta raquetas de tenis-, desde Asia a través del océano Pacífico hasta la costa occidental de Estados Unidos.
Marine Traffic, un sitio web de seguimiento de barcos, contó más de 50 buques frente a Long Beach y Los Ángeles el 13 de octubre, pero en septiembre se alcanzó el récord de 73.
Estos dos puertos manejan la mayor parte de la carga procedente de China, por lo que una vez que comienza la congestión, puede empeorar rápidamente, dice Janet Porter, presidenta de la junta editorial de Lloyd’s List.
«Todo el ciclo de envío se ha ralentizado. Así que hay barcos esperando días, incluso un par de semanas para descargar», afirma.
En los ocho primeros meses del año se produjo un incremento de aproximadamente un 25% más en el envío de carga hacia Estados Unidos desde Asia en comparación con el mismo periodo de 2019, antes de la pandemia, según Container Trades Statistics.
Los volúmenes se han mantenido prácticamente iguales entre Asia y Europa.
En la costa este también se registraron colas de barcos fuera del puerto de Savannah, en Georgia.
Luego está el proceso de transportar las mercancías tierra adentro desde depósitos llenos de contenedores por parte de una fuerza laboral afectada por la pandemia.
Por el lado de la oferta, los puertos bloqueados en China y en otros lugares también han contribuido a la escasez.
¿Los estadounidenses han comprado más cosas?
Sí, en lugar de irse de vacaciones o salir a cenar.
La demanda de bienes de consumo es en general un 22% más alta en comparación con los niveles anteriores a la pandemia (si se contrasta febrero de 2020 con agosto de 2021).
El grupo Capital Economics observa aumentos importantes en las importaciones de juguetes y artículos deportivos (un 74% más), así como electrodomésticos (un 49% más).
Varios factores llevaron a un aumento de las importaciones, explica el profesor Christopher Tang, de la Universidad de California, en Los Ángeles.
«En la actualidad, muchos transportistas marítimos llevan mercancías. Son miles de millones de dólares en adornos de Halloween y de Navidad, como árboles artificiales y luces».
El profesor Tang también dice que una causa de la demanda es la presión de Estados Unidos para una recuperación económica.
A medida que las empresas alientan a los empleados a regresar a las oficinas para trabajar en persona, hay un gran aumento en la demanda de equipos de oficina que van desde computadoras, impresoras y servidores, y muchos de ellos ahora están atrapados en varios contenedores de Asia.
Esto se suma a equipos de oficina adaptados para reducir la propagación del coronavirus.
«Muchos filtros de aire junto con equipos de ventilación también están en estos contenedores esperando ser descargados», dice el profesor Tang.
Y hay otro problema: la falta de trabajadores portuarios calificados, conductores de camiones y personal ferroviario para mover todo, enumera Gary Hufbauer, del Instituto Peterson de Economía Internacional.
«En gran parte, esto es por la variante Delta, pero también por el retiro, particularmente de los conductores de camiones», añade.
¿Podría haberse evitado algo de esto?
«No creo que nadie haya previsto este enorme aumento de la demanda, especialmente después de que los barcos se paralizaron durante la pandemia», opina Porter.
La vista de los barcos esperando frente a la costa de California ha generado debates más profundos sobre el estado de las cadenas de suministro estadounidenses.
Durante mucho tiempo hubo demandas para actualizar la infraestructura en general.
El jefe de gabinete de la Casa Blanca informó que el gobierno de Joe Biden está abordando el «lío de la cadena de suministro» que heredaron.
Los expertos señalan problemas de capacidad logística en los puertos estadounidenses que ya estaban presentes antes de la pandemia.
«Esto mostró años de inversión inadecuada. La capacidad portuaria no se deteriora rápidamente, pero probablemente había menos del 5% de margen de capacidad sobrante», dice Hufbauer.
El gobierno estadounidense creó un grupo de trabajo para tratar de aliviar los cuellos de botella y el puerto de Los Ángeles ahora estará abierto por más tiempo para mejorar la situación.
Pero los expertos de la industria no esperan que el problema termine pronto.