Shanghái.– El libro sagrado del cristianismo, la Biblia, no puede comprarse en China desde hace varios días a través de Internet, donde los mayores portales de venta electrónica lo han retirado, tal y como ha podido comprobar Efe.
“Lo siento, no se encuentran productos relacionados». Este mensaje aparece como resultado en el buscador del portal electrónico JD, una de las tiendas online más famosas de China, que aunque está especializada en electrónica, vende casi todo tipo de productos.
Tampoco aparece el libro sagrado en ninguna tienda de Taobao, el portal perteneciente al gigante del comercio electrónico, Alibaba, donde millones de vendedores minoristas ofrecen sus artículos.
En el portal existe la posibilidad de entablar una conversación escrita con los vendedores a través de un chat y uno de los portales confirmó a Efe que habían retirado la Biblia, pero ofreció la posibilidad de venderla fuera de esa plataforma.
“Ahora no la podemos vender en público, últimamente está muy tensa la situación”, apuntó a través del chat el vendedor, quien proporcionó fotografías de las biblias que vende.
En otra tienda de artículos religiosos también dijeron que no la venden, mientras que otras librerías online y tiendas similares, donde tampoco aparece, no respondieron al mensaje.
En varias de las tiendas sí pueden encontrarse, sin embargo, libros relacionados con el cristianismo o cuentos infantiles al respecto, pero no La Biblia original.
Efe comprobó que el libro no está presente ni en las ya mencionadas JD y Taobao ni tampoco en la versión china de Amazon ni en Dang Dang, portal especializado en la venta de libros.
A través de Wechat, la herramienta de mensajería instantánea más popular entre los chinos, circula además estos días en los grupos de cristianos un mensaje que asegura que a partir del 30 de marzo no se puede vender la Biblia a través de internet.
Precisamente el día de ayer el Gobierno chino publicó una nueva normativa sobre creencias religiosas en la que aseguró que “las religiones en el país deben ser de orientación china y proporcionarán una orientación activa a las religiones para que puedan adaptarse a la sociedad socialista».
En China, aunque no hay datos oficiales, se calcula que hay entre 60 y 70 millones de cristianos de todas las confesiones y que más de la mitad de ellos se agrupan en congregaciones no afiliadas al Gobierno, motivo por el suelen ser perseguidos.