Un estudio hecho por la Secretaría de Educación y la Asociación Dominicana de Profesores comprobó que, a cuatro semanas de iniciado el presente año escolar, existe  un déficit  de  6,898 docentes para impartir clases y ocupar  puestos de director y subdirector, contra una disponibilidad de solo 1,585 inscritos en  un Registro de Elegibles. Sin contar estos últimos, hay un déficit de 5,313 docentes.

Aún complementando a aquellos profesores que solo tienen una tanda, faltarían docentes para cubrir el déficit. La Secretaría de Educación ha convocado un concurso nacional para los días 19, 20 y 21 de octubre, con el propósito de contratar los docentes necesarios para cubrir el déficit y resolver una situación que mantiene ociosos a muchos estudiantes en todo el país.

Una pregunta obligada es por qué tenemos esta vez un déficit tan alto de docentes, con el año escolar en marcha. Es  posible que  haya disminuido el interés por la carrera docente, o al menos por ejercerla para el Estado, debido a  remuneración y prestaciones sociales poco atractivas, lo que no significaría, en modo alguno, que el sector privado pague mejor. Se sabe, por otra parte, que la Secretaría de Educación no ha tenido todos los recursos que necesita para encaminar sus planes. Hay que trabajar en las causas para buscar soluciones.

Portabilidad numérica

El país escala desde hoy  un paso más en el desarrollo de las comunicaciones. La portabilidad numérica beneficiará a  millones de usuarios de telefonía alámbrica y móvil. Se trata del derecho a conservar el número telefónico en cualquiera de   las prestadoras de servicio que haya elegido el usuario. Para avanzar este paso las empresas telefónicas han debido invertir en tecnología para poder asimilar con su mismo a usuarios que decidan cambiar de prestadora.

El siguiente paso de avance debería ser una reducción de  las altas cargas fiscales que encarecen en el país el servicio de telefonía y transmisión de data. El sector comunicaciones es uno de los que más aporta al Producto Interno Bruto. Su crecimiento en términos de inversión y actualización ha sido vertiginoso, pero las altas cargas fiscales todavía significan un freno tanto que permita crecer aún más la  oferta y lograr el mismo efecto en la demanda. Que la portabilidad estimule el desmonte impositivo.