El geólogo Osiris de León explicó que el derrumbe ocurrido hoy en la avenida Leopoldo Navarro esquina avenida Bolívar, fue producto de un proceso de saturación de suelo, aumento del peso por la presencia de agua y falla por el efecto cortante en la inclinación del terreno del lado de la avenida Leopoldo Navarro.

“Esas aguas estaban entrando por el talud (inclinación del terreno), estaba aumentando el peso y como la roca no es una arcilla caliza de excelente calidad, sino que es una marga caliza que en profundidad se degrada a una marga arcillosa y en consecuencia su resistencia a la compresión no es muy alta”, explicó de León.

El geólogo consideró que la situación en la que se encontraba el terreno debió ser avisada con antelación por quienes se encargaron de hacer el estudio de suelo para la construcción de ese proyecto, así como por las autoridades de Obras Públicas.  

“Eso debió ser advertido con tiempo por los promotores del proyecto, por quienes hicieron los estudios de suelo del proyecto y por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) que debe velar por cualquier excavación que se haga en la República Dominicana”, puntualizó el especialista en la materia.  

Dijo además que el MOPC debió convocar a los organismos correspondientes para que el terreno fuera protegido, en vista de que la construcción no avanzaría con la aceración que ameritaba.