Un 95 % de la población ha sentido alguna vez un entumecimiento. La pérdida de sensibilidad, hormigueo e incluso el dolor en piernas, pies, brazos y manos son síntomas de estos entumecimientos, anecdóticos en la mayoría de los casos pero que en otros constituyen el inicio de otros trastornos.
Según explica Alberto Freire, de la Sociedad Española de Médicos de Familia y Generales (SEMG), su origen está en la compresión de los nervios o “cables” que transmiten al cerebro las señales eléctricas, causadas por malas posturas, movimientos repetitivos, algunos trastornos crónicos o el envejecimiento.
Las primeras experiencias de entumecimiento suelen venir de malas posturas al dormir, leer o trabajar sentado.