Por un desmonte de precios

Por un desmonte de precios

Las alzas internacionales de los alimentos y materias primas, desde finales del año pasado, provocaron aquí inflación en los precios de artículos de primera necesidad como el pan y el pollo, para citar solamente dos. De unas semanas a esta parte, los precios de los denominados “commodities” agrícolas, entre ellos el maíz, el trigo y la soya, se han ido desplomando también de manera sustancial. Han caído casi a la mitad  los precios del petróleo y sus derivados y esto ha permitido abaratar los combustibles en nuestro país. En fin de cuentas, ha habido una rebaja apreciable en materias primas y bienes terminados.

Vistas las  circunstancias, lo que procede es que las rebajas en materias primas y bienes terminados que influyen en la producción local lleguen al consumidor en las proporciones correspondientes. Ahora aparecen empresas transportistas disfrazadas de sindicatos alegando que no pueden bajar los pasajes que han inflado, por cierto que en muchos casos a pesar de recibir subsidios en carburantes como el gasoil y el gas licuado de petróleo. Tampoco hay justificación para alzas que están afectando a alimentos como el pollo, y debería analizarse la situación del pan, cuya unidad de tres pesos desapareció del mercado durante la carrera alcista del trigo.  Si la inflación de los costos por alzas de materias e insumos justificó alzas de precios, ahora es de justicia bajarlos.

Excluidos de la Seguridad Social

El Sistema Dominicano de Seguridad Social se ha ido consolidando de una manera positiva. Muchos de los obstáculos que impedían su avance y los intereses que obstaculizaban el Seguro Familiar de Salud han tenido que ceder ante la voluntad de que estos instrumentos funcionen como debe ser. Hay que reconocer que las autoridades han hecho esfuerzos extraordinarios para lograr estos avances.

Sin embargo, preocupa que una franja de la clase laboral esté aún desprotegida. Se trata de los trabajadores de pequeños negocios y talleres que no están inscritos en ninguna de las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS) y cuyos patronos se resisten a cotizar la parte que les corresponde. ¿Qué se puede hacer para incluir a esta gente en los beneficios del SFS? La Secretaría de Estado de Trabajo podría hacer un censo sobre el particular, que serviría  como pauta para incluir a estos trabajadores entre los beneficiarios del sistema.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas