La cúpula del PRSC ha pospuesto nuevamente la Asamblea para renovar sus autoridades que debió celebrarse en marzo, abonando la práctica de posposiciones como norma habitual de comportamiento. Con ello perjudica la nación y a sí mismo; basándonos en las recientes elecciones alemanas en las que resultó eliminado el Partido Liberal aliado al gobierno, a pesar de haber ganado el socialcristianismo gobernante y reelegida AngelaMerckel postulantes de disciplina fiscal.
La posposición de ahora le priva a la nación la posibilidad de disponer una buena oposición imprescindible para el buen gobierno en un período estratégicamente especial para tareas de evaluación y reprogramación a fines de año.
La nación reclama una buena oposición a un gobierno que habrá transcurrido a finales de año la tercera parte de su período sin haber podido plasmar suficientemente a realidades sus buenas intenciones, tales como las correcciones prometidas y el gobernar mediante pactos; en medio de escenarios económicos y financieros que distan de ser halagüeños para posibilitarlos: A julio las recaudaciones solo cubrían el 85% de las cargas fijas gubernamentales (gastos corrientes + amortizaciones) exponiéndonos a déficits anualizados del orden de los RD$ 100,000 millones, a sacrificar inversiones sociales y económicas o a someterse a mayores endeudamientos demandantes de mayores cargas fijas. Estas limitaciones financieras junto a gerenciales están determinando que: las escuelas no se hayan construido ágilmente para extender tandas y brindar adecuadamente meriendas escolares; productores se quejen de asistencia y financiamientos que no llegan oportunamente; comunidades protesten por precariedades en prestación de servicios; economía siga contrayéndose por excesivas tributaciones y falta de confianza, aumentando desempleos robustecedores, junto a impunidad y dispendio, de delincuencias y tráfico de ilegalidades. El gobierno necesita una oposición que reforzando buenas iniciativas, denuncie los obstáculos gerenciales que su funcionariado encubra y compense eventuales pasividades de subordinados presidenciales.
El PRSC ejerciendo oposición institucional tiene mucho que aportar al respecto partiendo de la corrección de déficits mediante disciplina fiscal reductora de gastos burocráticos, subsidios e intereses de una deuda pública susceptible de ser renegociada.
Y tiene aval ideológico necesario para recordar que la Alemania donde gobierna el ascetismo socialcristiano compatible con austeridad reformista no solo no ha sufrido crisis significativa sino que ayuda a recuperar a la Europa regida por el socio-populismo; atributos que, contrario a lo comúnmente creído, proporciona dividendos políticas observados en la reelección de Angela Merckel.
Nada de esto podrá implementarse con tantas posposiciones en el PRSC, organización que tampoco parece haberse percatado de la lección alemana sobre desaparición de partidos que se aferran a otros por participar en el poder, como acaba de sucederle al Partido Liberal germano.