Juan María Ramírez 
La transformación de la Cámara de Cuentas de la República Dominicana (CCRD) para sacarla del estado de descrédito, así como el cumplimiento del plan anual de auditoría, dominan los temas de los postulantes a integrar ese órgano de control para el período 2024-2028.
Juan Antonio Botello Vicente, oriundo de la provincia La Altagracia, expuso que de llegar a la CCRD iniciaría su trabajo limpiando la mala percepción de la sociedad sobre ese importante órgano de control del Estado.
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Para esos fines, asegura, llegaría con las herramientas que les otorga la Constitución de la República y la Ley 18-24, en su artículo 15, numeral 2 y 8, transparentar las auditorías, sacar las evidencias y soportarlas.
Considera necesario desarmar la gestión humana de la CCRD, comenzando por los auditores internos y externos, quienes deben devengar una buena remuneración, tras señalar que manejan cifran multimillonaria de dinero.
Señala que cuando un auditor administra entre dos o cuatro mil millones de pesos, pero dejó en su hogar el rancho ardiendo, no tienen ánimo de levantar el lápiz.
De su lado, Junior Torres Morel, director administrativo del Instituto Duartiano, emularía al Padre de la Patria, Juan Pablo Duarte, en caso de ser escogido por el Congreso a miembro de la CCRD, en cuanto a su honestidad y rectitud en el manejo de los fondos públicos.
Manifestó que Duarte está presente en el ciudadano que no lanza la basura en la calle, el respeto de las luces del semáforo, la Constitución y las leyes.
Atacaría las causas que impiden que el órgano del control cumpla con el Plan Anual de Auditorías, incumplimiento que atribuye a falta de planificación efectiva.
