PRD secuestrado

PRD secuestrado

UBI RIVAS
El PRD sigue secuestrado por el PPH, una extraña formación cancerigena que debió sucumbir ante la avisada tragedia del 16 de mayo último, y que a apenas 72 horas de ese desastre de estrategia y logística política, incurre en la reiteración del absurdo al expulsar al licenciado Hatuey De Camps, el único alto dirigente promisorio de esa parcela política.

El único dirigente promisorio de esa parcela política, repito, porque algunos de sus epocales, por no decir todos, sucumbieron ante el despropósito mayúsculo de apoyar una causa perdida como era la reelección, que tanto insistí en su inviabilidad por el desastre económico que le relacionaba con el colapso de la economía dominicana.

Con Hatuey fueron expulsados por el PPH dirigentes de la talla del licenciado Rafael Flores Estrella, valor personal personificado como pocas referencias de antaño y hogaño, la diputada Felipa Gómez, mujer templada en la fragua del laborantismo político y el deber partidario admirable.

Con Hatuey el PPH guillotinó a dirigentes de la envergadura de Henri Mejía, integuérrimo y solidario, así como a Príamo Medina, capaz como el que más, formidable expositor, trabajador infatigable, todos de méritos superiores a quienes incurrieron en el dislate y la traición de «expulsarlos».

Expulsarlos entre comillas, porque esa es una decisión infortunada como miserable que pronto se revertirá y tendrá como final el zafacón de las incoherencias y faltas graves en las que han incurrido dirigentes del PRD de hoy y ayer, sin excluir al líder máximo, doctor José Francisco Peña Gómez, que cometió muchísimas y que su desaparición física contribuye a una momentánea amnesia compasiva.

Con el fardo aplastante de una derrota humillante que le propinó Leonel Fernández el 16 de mayo y que pronostiqué tres veces desde febrero 26 que sería del 57%, ahora el PRD, secuestrado aún por el PPH, un contrasentido histórico sin razón de ser nunca, mucho menos hoy, se apresta a expulsar a los senadores que gravaron el sirope de maíz y aprobaron la Reforma Fiscal, dos actitudes correctas, como pocas veces han referenciado ese hemiciclo cameral.

Analizar concienzuda y humildemente, los factores de la derrota, propiciar la unión y confraternidad, la concordia y el planeamiento a las elecciones intermedias de 2006 las cuales, hoy por hoy, como está y pinta el panorama político el PLD las tiene todas consigo para desbancar la superioridad numérica del PRD en el Congreso y los municipios, han debido ser los ajetreos que se presume han debido concentrar los ánimos y bríos del PRD en esta etapa de iniciar un abajismo que por lo que se proyecta, volverá a transitar la largura en lo que el PRD siempre ha demostrado disponer de un máster.

«El PRD en el gobierno no sabe gobernar y en la oposición no deja gobernar», sentenció para la posteridad en estos días el superdirigente histórico del PRD y hoy del PLD, doctor Euclides Gutiérrez Félix, una verdad más grande que el universo.

Aunque los factores y también inconductas dañosas del gobierno anterior hegemonizado por el nefasto PPH gravitan muy pesado dentro del PRD hoy, la figura de Hatuey de Camps permanece como la única no chamuscada por tantos dislates y despropósitos mayúsculos, y de erradicar las plagas de garrapatas que postran al buey blanco, será la disyuntiva de un reputar del PRD ó de una consolidación en el poder, más allá de 2008, del PLD, sobre todo, si Leonel Fernández domina la tragedia que heredó del déficit energético, déficit financiero, prima del dólar y Comer Primero.

El resto, viene envuelto en el paquete.

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