Los mayores niveles de precariedad en el empleo el año pasado, se registraron en agricultura y ganadería (88.6%), construcción (83.4%), transporte y comunicaciones (75.8%), otros servicios (74.8%), comercio (74.4%), hoteles, bares y restaurantes (64.5%) e industrias (44.2%).

Los datos los aporta el estudio sobre “Índice de calidad del empleo en la República Dominicana”, del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo.

En cambio, los mayores niveles de calidad del empleo se encuentran en administración pública y defensa (89.5%), salud y asistencia social (87%), electricidad y agua (86.6%), enseñanza (84.0%), intermediación financiera (75%) e industrias (55.8%).

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Del total de los ocupados, el empleo de calidad representa el 38.9%, del cual solo el 15.2% es de alta calidad. El empleo precario alcanza el 61.1% de los ocupados. El muy precario tiene un porcentaje de 31.9%.

El asalariado público es que concentra mayor cantidad de empleo de calidad (92.4%), seguido por el privado (57.3%), independientes (7.6%) y servicio doméstico (6.1%).

El estudio señala que en el caso de los asalariados privados, existe una alta proporción de ocupados de baja calidad en el componente de horas de trabajo, lo que sugiere que trabajan más horas sin pago o menos horas de manera involuntaria. Resalta que los asalariados públicos disfruten de mejores condiciones laborales: mejores ingresos, mayor acceso a la seguridad social, mayor apego a las horas trabajadas a la semana y mayor estabilidad.

Según el estudio, los trabajadores independientes enfrentan las condiciones más precarias, aunque presentan una relativa estabilidad laboral. El ingreso promedio mensual era de RD$24,600 en el 2023.