Con  frecuencia la jefatura de la Policía tiene que ordenar investigaciones sobre incidentes en que sus agentes violan los procedimientos  que pautan la conducta que deben  asumir en cada circunstancia. Hace poco  canceló a un cabo y dos rasos, y ordenó encierro de 30 días para dos tenientes, por violar procedimientos policiales en el incidente en que una persona resultó herida de bala al ser atacado a tiros un vehículo de la merenguera Miriam Cruz.

Esta vez ha dispuesto que una comisión de alto nivel, dirigida por el general Franklin Vittini Durán,  investigue las circunstancias en que policías cometieron la barbaridad de arrestar a un hombre y su  niña de unos cinco años de edad, entre un grupo de  personas que protestaban en  el sector Los Ciruelitos, de Santiago. De hecho, la disolución a bombazos de  una protesta de calderos vacíos fue, de por sí, un acto mayúsculo de intolerancia, agravado por el atropello contra una inocente niña.

La jefatura policial debería tomar medidas de prevención para evitar que los policías violenten los procedimientos  que les indican cómo actuar en cada circunstancia. Nos atrevemos a afirmar que ningún “librito” autoriza someter a inocentes a un trato aterrador como el que vivió esa niña, o disolver violentamente una protesta pacífica. Es necesario trabajar más para prevenir violaciones que siempre provocan daño.

¿Sindicalismo o vandalismo?

La ruta La Romana-Higüey vuelve a ser manzana de discordia entre sindicatos de transporte cuyos integrantes han llegado a los extremos de agresión mutua con armas de fuego y ataques contra vehículos de particulares que frecuentan esa ruta. Cada uno de los gremios quiere tener supremacía y control sobre los otros, lo que ha motivado las disputas frecuentes. La Policía ha tenido que montar vigilancia en esa ruta, para prevenir incidentes violentos.

Estos actos vandálicos son fatales para el turismo de la región.  La Asociación Nacional de Hoteles y Turismo (Asonahores) ha manifestado preocupación  por los  efectos adversos de  estos enfrentamientos para el  turismo. La Policía inclusive persigue a varias personas  armadas que actúan a nombre de los sindicatos enfrentados. Hay que actuar para ponerle fin a estos actos que nada tienen de sindicalismo y sí mucho de vandalismo.