Hoy 
NUEVA YORK (EFE).- El precio del crudo mantuvo ayer una fuerte tendencia al alza y se acercó a 49 dólares en Nueva York, después de disminuir en 9,1 millones de barriles las reservas almacenadas en Estados Unidos a causa del huracán «Iván». Los contratos del Petróleo Intermedio de Texas para entrega en noviembre quedaron en un precio de 48,35 dólares, después de un incremento de 1,59 dólares, o un 3,4 por ciento, respecto de la sesión anterior.
El barril de crudo tejano tocó 48,65 dólares durante la sesión y se aproximó así al máximo histórico de 48,70 dólares a que cerró el 19 de agosto.
El precio de los contratos de petróleo Brent registró un alza del 3,5 por ciento en Londres y quedó en 44,93 dólares, después de superar los 45 dólares durante la sesión.
La fuerte inclinación alcista se extendió a la gasolina y al gasóleo de calefacción, debido también al descenso que registraron las reservas almacenadas de estos productos.
Los contratos de gasolina para entrega en octubre quedaron en un precio de 1,34 dólares por galón (3,78 litros), después de subir alrededor de cinco centavos, y el gasóleo cerró a 1,34 dólares igualmente, tras un avance de cuatro centavos respecto del martes.
Las compras de contratos se aceleraron nada más divulgarse las últimas cifras sobre existencias almacenadas en la pasada semana, que fueron más desfavorables de lo que esperaban los analistas.
Las reservas de petróleo bajaron en 9,1 millones de barriles y quedaron en un total de 269,5 millones, una cifra inferior en un 4,9 por ciento a la de hace un año, según cálculos de la Agencia de Información de Energía (EIA), que es la división analítica del Departamento de Energía.
Las reservas de gasolina bajaron en 2,8 millones de barriles y las de productos destilados, incluidos el gasóleo de calefacción y el diesel, retrocedieron en 1,5 millones, de las que un millón correspondió al gasóleo.
El descenso en reservas y en la producción de las refinerías fue consecuencia en gran parte del paso del huracán «Iván» por el Golfo de México, que interrumpió la producción e impidió la llegada de petroleros a las terminales de descarga.
Las inclemencias meteorológicas también afectaron a las refinerías y redujo la producción de gasolina y gasóleo.
La caída en existencias de petróleo superó las previsiones de los expertos, que esperaban una reducción de entre cinco y siete millones de barriles.
«»Iván» ha retrasado algunos envíos y probablemente eso hace que la cifra sea algo más negativa de lo normal. Pero no hay duda de que (las existencias) son más ajustadas de lo que veíamos hace unas semanas», comentó hoy Tyler Dann, de la firma AIM Investments, en el canal financiero CNBC.
Es la octava ocasión consecutiva en que desciende el volumen de existencias de petróleo, y en sólo las dos últimas semanas evaluadas el retroceso ha sido de 16,2 millones.
La merma constante en las reservas reaviva el temor de los operadores de que la oferta global no sea suficiente para atender la elevada demanda, lo que presiona al alza a los precios.
Algunos analistas de nuevo consideran probable que el barril alcance la barrera psicológica de 50 dólares en próximas sesiones.
«No me sorprendería ver 50 dólares», señaló Dann.
Algunos expertos señalaron además que el perjuicio causado por el huracán a la industria en el sur de EEUU podría ser mayor de lo previsto y es otro factor que influye en el alza de precios.
Desde el inicio de la pasada semana se han perdido 9 millones de barriles de la producción regular que se alcanza en el Golfo de México, de alrededor de 1,7 millones de barriles diarios.
Siete plataformas marinas fijas han quedado destruidas y otras cuatro registraron daños importantes, y se han detectado trece fugas en oleoductos en ese área, según datos del Servicio federal de Gestión de Minerales.
