Preguntas de mamá y la salud oral de sus hijos

Preguntas de mamá y la salud oral de sus hijos

La salud oral del bebé está íntimamente ligada a la salud y cuidados de la madre desde el embarazo. Elementos sencillos, pero sumamente importantes, como una sana alimentación, higiene oral adecuada, ingesta de suplementos alimenticios bajo la supervisión del gineco-obstetra, marcan la diferencia en múltiples ocasiones en la dentición del bebé.

El momento ideal para la embarazada recibir atención odontológica es en el segundo trimestre; sin embargo, si se presenta una emergencia, o la paciente desarrolla una afección periodontal, es preferible que reciba las atenciones odontológicas, claro en una acción conjunta del médico y odontólogo.

El estrés causado por el dolor, así como la cantidad de bacterias de una enfermedad periodontal son más dañinos para la madre y el bebé que el hecho de que ella reciba atención odontológica.

Luego del nacimiento del niño, su boca debe ser higienizada después de cada toma de alimentos. En el mercado existen los elementos necesarios, pero es fácil hacerlo con una gasa estéril húmeda con agua apta para el consumo humano, frotando suavemente, los rebordes alveolares, mucosa, lengua y carrillos. La gasa debe ser desechada y usar una nueva en cada proceso.

Con la erupción de los primeros dientes, es recomendable utilizar el cepillo dental. Este proceso debe ser realizado por los padres; más tarde, cuando el niño pueda manipular el cepillo, es bueno dejar que juegue con él, se lo lleve a la boca, lo muerda, pues esto lo familiarizara, le hará perder el miedo al cepillo dental.

Si los padres y hermanos mayores se cepillan delante del niño, por imitación él va a intentar hacerlo solo. Un adulto debe siempre repasar ese cepillado y utilizar el hilo dental. Un error muy común es darle el último biberón de la noche con azúcar, para lograr más horas de sueño o durante el día untarle al chupete miel o mermeladas para tranquilizarle, el contacto de los carbohidratos con los dientes por tanto tiempo produce descalcificación, desencadenándose la caries de biberón, con sus funestas consecuencias en la salud oral y general del paciente.

Diversos factores dan origen a la caries dental: mala higiene, dieta rica en azúcares, estructura dentaria, presencia de bacterias y -definitivamente- la susceptibilidad del paciente, que está asociada a la herencia. Sin embargo muchas madres llegan a la consulta del odontopediatra convencidas de que su hijo tiene caries o “dientes malos” como suelen decir, porque ellas también. ¡¡Cuidado!!, esto solo es una excusa. Existen hoy múltiples tratamientos preventivos que le ayudarán a su hijo a no padecer de caries dental. Es su responsabilidad visitar al dentista con su hijo cada seis meses y vigilar su comportamiento con relación a su cuidado oral.
Contáctenos a info@odontodom.com.

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