Premios Nobel Paz abogan por un mundo sin violencia

Premios Nobel Paz abogan por un mundo sin violencia

Roma. EFE. Varios Premios Nobel de la Paz enviaron ayer desde Roma un mensaje de esperanza para un mundo sin violencia, un objetivo posible de alcanzar, dijeron, si hay compromiso para ello, en una jornada en la que la inmigración y los refugiados fueron protagonistas. Una pantalla gigante con la imagen del fallecido presidente surafricano Nelson Mandela presidió la apertura de esta XIV Cumbre Internacional, un encuentro en el que doce galardonados con el Nobel y doce organizaciones que también obtuvieron el reconocimiento se reunieron con la intención de compartir ideas para lograr “un mundo en paz».

En concreto, el encuentro reúne al líder religioso tibetano Dalai Lama; al último presidente de la Unión Soviética, Mijail Gorbachov; al arzobispo y héroe contra el apartheid en Sudáfrica, Desmond Tutu, y al expresidente de Timor Oriental José Ramos-Horta.

También asisten la abogada iraní Shirin Ebadi, la periodista yemení Tawakkul Karman, el expresidente polaco Lech Walesa, las activistas Leymah Roberta Gbowee (Liberia) y Joddy Williams (Estados Unidos) y de Irlanda del Norte, Mairead Maguire, David Trimble y Betty Williams.

En esta cumbre el papa Francisco y el Dalai Lama se refirieron al “sentimiento de fraternidad” entre hombres y mujeres para conseguir este deseado mundo sin violencia.

El papa aseguró a través de un mensaje leído en el acto que “en el corazón de todos los hombres y mujeres está el deseo de una vida plena en paz” en el que mencionó que este sentimiento de fraternidad “crece en conjunto con los otros”, en una relación que no es de enemigos, “sino como hermanos y hermanas». Recordó a Nelson Mandela, en honor a quien se celebra esta Cumbre, y ensalzó su “legado de no violencia” que, dijo, “continúa inspirando el mundo». Una idea que compartió el Dalai Lama, quien pronunció su discurso frente a los asistentes al evento y aseguró que el mundo “necesita educación para poder desarrollarse y crear una atmósfera feliz y en paz». Animó a “pensar en la comunidad” y alejarse del mensaje del “yo, yo y yo”.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas