Para el infectólogo Clemente Terrero una de las mayores amenazas que tiene el mundo actual es el surgimiento de nuevas cepas de COVID-19 y que alguna de ellas sean resistentes a la vacuna.
“Una de las grandes amenazas sería el aumento del número de casos y una cepa resistente a la vacuna, esto es, que la vacuna no le haga ningún efecto de prevención. Entonces, se tendría que trabajar una nueva vacuna de acuerdo a este tipo de características”, planteó el galeno.
Sin embargo, destacó que los dos tipos de vacunas que se han estado aplicando, AstraZeneca y la vacuna china Sinovac, tendrán buena efectividad.
Explicó que la primera tiene una efectividad de un 62 a un 70 por ciento la primera dosis, y que la vacuna china tiene una efectividad de un 50 por ciento. Indicó que luego esa efectividad aumenta con la segunda dosis de refuerzo, colocándose por encima del 90%.
En tanto, comparte los planes de regreso gradual a las escuelas y el trabajo de ir planificando las clases presenciales, porque se apeló a la virtualidad en un momento en que la pandemia tenía mucha intensidad en la República Dominicana, cuando no teníamos la vacuna.
“Pensamos que una vez vacunemos a una parte proporcionalmente importante de la población dominicana podremos ir poco a poco a las clases presenciales, sobre todo, es importante garantizar la vacunación al personal que trabajará en los centros educativos”, dijo al ser entrevistado en el programa «Toque Final» con Julio Martínez Pozo, que se transmite por Antena 7.
El director del hospital Robert Reid Cabral indicó que cuando más del 60 por ciento de la población esté vacunada, en dos o tres meses, estarán las condiciones de ir abriendo más la circulación de las personas.