Hoy 
POR CARMEN MATOS
En República Dominicana el índice de sobrepeso y obesidad es de un 46 por ciento, mientras que en el ámbito infantil es de un 13.8, según estadísticas del año 2000 divulgados ayer por un especialista que atribuyó la situación a la inactividad física y al consumo de refrescos y comida rápida.
Sócrates Mañón, endocrinólogo, ofreció los resultados de varios estudios de organismos dominicanos e internacionales durante la conferencia “Hacia una alimentación sana”, que organizó la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Nacional Evangélica (UNEV).
Según el estudio del Centro Nacional de Investigación de Salud Materno Infantil (CENISMI), uno de cada tres niños dominicanos de clases media y alta está en sobrepeso u obesidad. Asímismo, los niños de clase baja entre los seis y nueve años de edad, presentan un alto índice de desnutrición.
La obesidad, considerada por el doctor Mañón como una epidemia en el ámbito mundial, se caracteriza por una acumulación excesiva de grasa corporal debido a un desequilibrio del proceso digestivo y se vincula a factores genéticos, hormonales, ambientales, psicológicos, sociales y de estilo de vida.
Un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) del año 2005 reveló que en el mundo hay mil millones de personas obesas, de las cuales 155 millones son niños y para el año 2015 pronosticó que la cifra aumentará sobre los 1,500 millones. El estudio posiciona a Cuba como el país con mayor índice de obesidad en Latinoamérica, con un 30 por ciento, seguido de Brasil con un 28.4 y Argentina con un 26.4 por ciento.
En el caso de República Dominicana, Mañón asegura que las deficiencias alimenticias se deben a los factores educativo y económico, pues “cuando la persona está a nivel de subsistencia come lo que aparezca o lo que más llene”.
Alertó sobre la diabetes como complicación primaria de la obesidad, la cual reduce entre cinco y diez años la expectativa de vida, convirtiéndose en la sexta causa de muerte en el mundo.
Reconoció además que la naturaleza de la alimentación dominicana es saludable, pero consideró que “lo que es malo es la situación del dominicano para proveerse de la alimentación. A los dominicanos nos gustan las comidas saladas y también los alimentos fritos que tienden a duplicar su contenido calórico sobre los horneados y hervidos”, agregó.
Expresó su descontento ante el descuido de la Comisión Especial Contra Afecciones Crónicas No Transmisibles en que fue nombrado como presidente por la Secretaría de Salud Pública, la entidad estaría encargada de realizar estudios nacionales y educar sobre los males de la obesidad.
“Deberíamos incluir la Educación Nutricional en las escuelas, y las autoridades deben organizar campañas a nivel universitario y de escuelas primarias para contrarrestar el sobrepeso”, sostuvo.
La actividad, en que Mañón compartió las estadísticas, forma parte de una serie de eventos en preparación para el “Primer Congreso Internacional de Medicina Integrativa”, para noviembre del próximo año, el cual pretende reunir a especialistas de diez países de Latinoamérica y Europa del área de la medicina, con miras a la fundación Hospital de medicina Integrativa de la UNEV.
La Medicina Integrativa es la fusión de prácticas de la medicina convencional con la naturista “queremos ser el primer centro de referencia de la medicina natural hospitalario en el país y el Caribe”, aseguró Wilfredo Mañón, decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UNEV.
De igual forma, el rector de la academia, Salustiano Mojica informó que en preparación para el congreso se estarán impartiendo diplomados, seminarios y conferencias en torno a la medicina Alternativa.
“En el país hay una necesidad, la mayoría de los hospitales utilizan el método convencional, pero la medicina alternativa no ha sido tomada en cuenta”, aseguró Mojica.
El evento, que reunió a diversos especialistas de la medicina, gremios, estudiantes, organismos nacionales, así como directivos de la UNEV, fue amenizado por la intérprete Michelle Cury.
