San Juan, Puerto Rico. El número de migrantes haitianos con destino a Estados Unidos atascados temporalmente en el norte de Colombia aumentó a unos 20.000, informó el jueves un alto funcionario estadounidense, haciendo eco de los reportes de un organismo local de derechos humanos.
“Está formando un cuello de botella humano”, dijo el funcionario, que habló con los reporteros a condición de no ser identificado.
A inicios de esta semana, la Defensoría del Pueblo de Colombia informó que entre 15.000 y 20.000 migrantes —en su gran mayoría oriundos de Haití— estaban atascados en la ciudad colombiana de Necocli a la espera de transbordadores que los lleven por el Golfo de Urabá hasta un punto donde puedan iniciar la peligrosa travesía por la selva rumbo a Panamá, a través de la brecha del Darién, que carece de caminos.
Las autoridades colombianas y panameñas han tratado de limitar el número de migrantes a 500 al día en los trasbordadores, pero el promedio de arribos diarios ha sido superior.
Aun así, sus posibilidades de ingresar a Estados Unidos también son limitadas, aunque logren abrirse camino por Centroamérica y México, donde miles de haitianos más se encuentran ahora atascados, muchos de ellos esperando por meses algún tipo de permiso para radicar y laborar.
Estados Unidos expulsó a más de 7.000 migrantes haitianos a Haití a bordo de 65 vuelos, del 19 de septiembre al 3 de octubre, de acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional estadounidense.
Las expulsiones a un país devastado desde hace muchos años han recibido fuertes críticas y llevaron a la renuncia de Daniel Foote, el enviado especial del gobierno de Joe Biden a Haití. “Los desafíos del frente migratorio son muy significativos”, afirmó el funcionario del gobierno estadounidense. “Estas son decisiones muy difíciles”.
El funcionario añadió que el gobierno de Estados Unidos podría sostener conversaciones regionales con los países afectados por el paso de los migrantes con el deseo de crear un enfoque colaborativo. El funcionario no detalló qué implicaciones tendría.
Tanto el gobierno de Donald Trump como el de Biden han estado conversando con autoridades de toda la región sobre las formas de desalentar la migración, en particular después de la crisis del mes pasado en la zona fronteriza de Del Rio, Texas, donde miles de haitianos se congregaron debajo de un puente antes que el campamento fuera desmantelado
. México ha cooperado con Estados Unidos para tratar de contener a los migrantes en la región sureste del país y ha expulsado migrantes provenientes de países como Guatemala. El miércoles, expulsó a 129 migrantes haitianos de Tapachula, en el sur de México, hacia Puerto Príncipe, la capital de Haití.