El empleo informal ha pasado a constituir el 56 por ciento de la población total ocupada del país, lo cual es atribuido por el estudio que acaba de presentar el Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) “al escaso dinamismo mostrado por los sectores de la producción real, que son los responsables  básicos del empleo formal”.

El estudio indica que el empleo informal es generalmente peor remunerado, con mayor inseguridad, más exigente en términos de horas de dedicación, y casi sin ninguna protección ante las inclemencias de la vida”. Según el estudio, las estadísticas del Banco Central muestran que desde el año 2004 al 2007 la economía ha creado 294 mil empleos adicionales, pero de ellos sólo 86 mil han sido absorbidos por el sector formal. Además, indica que de los trabajadores del sector formal, una parte importante ha sido empleado público, “lo cual tiende a ser no socialmente justo, pero sí económicamente ineficiente”. Ante esas cifras sobre el comportamiento del mercado de trabajo, el estudio del Conep plantea que el crecimiento de la economía ha sido muy desequilibrado en el orden social.

Indica que pese a que las tasas de desempleo  han vuelto a niveles un poco más tolerables, “casi todo el aumento de la población ocupada se ha concentrado en las actividades informales de la economía”.