Por FIOR GIL
Los síndicos y las comunidades organizadas de la provincia de Azua manifestaron ayer su preocupación ante la inminente instalación de una planta de carbón para generar 600 megavatios, en la comunidad de Hatillo en la Bahía de Ocoa, sin que se haya realizado un estudio de impacto ambiental.
Al mismo tiempo alegan que no se oponen a la instalación de dicha planta, ya que se trata de buscar soluciones a la crisis eléctrica que es un problema nacional, pero temen que comiencen los trabajos antes de tener la aprobación de la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales y que le causen daños irreparables a la producción agrícola.
Entretanto, el vicepresidente de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), ingeniero Radhamés Segura admitió que los estudios para la instalación de la planta todavía están en proceso y aclaró que para proyectos de esa naturaleza se analizan por separado cada uno de los elementos pero no se tienen todos los estudios antes de empezar los trabajos.
Segura indicó que de esa forma la Secretaría de Medio Ambiente va dando permisos parciales hasta tanto se van realizando los estudios.
El síndico de Las Charcas de Azua, Henry Tejeda, hablando a nombre de los demás representantes de la provincia, dijo en rueda de prensa que se han acercado a las autoridades de la CDEEE para que se le explique o le muestre alguna documentación que demuestre la aprobación de los estudios de impacto ambiental, pero dichas gestiones no han tenido resultado.
Estamos exigiendo ahora, que ya se firmó el contrato con la compañía que gano la licitación para la instalación de la planta, que las autoridades ofrezcan una explicación y que nos demuestren que el uso del carbón y la operación de la planta no hará daño a nuestra producción. De acuerdo a investigaciones sabemos que hay componentes en el carbón mineral, el mercurio, que es altamente peligroso para la pesca, expresó.
Además de Tejeda, estuvieron presentes en la rueda de prensa y firman el documento el síndico de Palmar de Ocoa, Máximo Freijomil y los licenciados Rudys Calderón, José Brito, Alexis Brito, Manuel Peña, Ramón Sánchez, Mayra Santana, Orfelin Terrero, Manuel Figuereo, Luis Calderón y Manuel Matos, entre otros representantes de asociaciones y entidades culturales y sociales, que conforman un comité para la Defensa del Medio Ambiente y Protección de los Derechos de los Recursos Naturales de la Provincia de Azua.
En su documento los munícipes de Azua plantean que esa provincia tiene todo lo que se necesita para producir con calidad y que fueron los primeros en exportar banano orgánico al mercado europeo y que actualmente mantienen esa producción. Somos también los primeros productores nacionales de tomate industrial, en nuestra provincia están instaladas todas las empresas especializadas en la producción de pasta de tomate y otros subproductos. Mas de 110 mil tareas irrigables de primera calidad son su principal fuente de ingresos, agregan.
Señalan que la agricultura y la pesca menor constituyen sus fuentes de ingresos, pero que la esperanza de un futuro para esa provincia la depositan en el turismo.
Nuestra preocupación es simple, tan simple como saber si esta planta cumple con todos los requisitos y procesos que garanticen la salud de los residentes de la comunidad y si permitirá el desarrollo agrícola y las fuentes actuales de trabajo que permiten el sustento de nuestras familias, sostienen.
Advierten que hasta la década de los años 70 se le decía a esa provincia la pobre Azua como un calificativo que exponía los niveles de pobreza y marginalidad, pero que esa situación cambió a partir de la construcción de la presa de Sabana Yegua y Azua se ha convertido en la principal zona agrícola de la región sur.
Tras manifestar su asombro por la instalación de esa planta sin mostrar dónde están los estudios alternativos de localización que debió hacer la CDEEE antes de definir a Hatillo en la Bahía de Ocoa como su lugar ideal.
Y al mismo tiempo se preguntan cómo es posible que la CDEEE exija a la empresa que construirá la planta el inicio de la obra civil a escasos tres meses sino se ha hecho el estudio de impacto ambiental, que es un requisito indispensable de la Secretaría de Medio Ambiente para evaluar la autorización de ese proyecto.
SEGURA
El vicepresidente de la CDEEE dijo en declaraciones ofrecidas en el programa El Gobierno de La Mañana, que la instalación de la planta a carbón tiene que hacerse de común acuerdo con la Secretaria de Medio Ambiente, organismo que evalúa y dice si se puede o no instalar en un lugar determinado.
Pero hasta el día de hoy hemos estado trabajando con ellos y hasta ahora no hemos tenido ningún tipo de dificultad por lo menos con la definición del lugar donde la planta será instalada ni con la ubicación de la misma, dijo.
Señaló que lo que ocurre con los estudios de impacto ambiental es que cuando se va a identificar un sitio se busca la conveniencia tomando en cuenta que se requiere un puerto de cierto calado para recibir un barco de 150 mil toneladas de carbón y también un lugar aislado de la población.
Indicó que además deberá contar con un estudio de impacto de suelos, entre otros. Esos estudios se van produciendo y Medio Ambiente va dando ordenes parciales, enfatizó Segura.