El industrial Celso Marranzini dijo ayer que la lentitud con que marchan las negociaciones entre el gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI) tiene muy preocupado al empresariado.

La inquietud de ese sector, según explicó, es fundamentalmente porque la culminación de esas negociaciones es la única forma en estos momentos de atraer recursos frescos y de generar confianza hacia el exterior, con respecto a los inversionistas, suplidores e instituciones evaluadoras de créditos. [tend]

Marranzini dijo que esto le daría la confianza a los inversionistas e instituciones del exterior de que en el país «se van a hacer las cosas bien hechas».

Con referencia a la información publicada ayer en esta sección, de que marchan muy lentas las negociaciones del gobierno con el FMI, Marranzini dijo que en ese sentido «está pesando mucho» el acuerdo de compra que hizo el Estado con la firma Unión Fenosa para la adquisición de las dos Empresas Distribuidoras de Energía del Norte y del Sur (Edenorte y Edesur).

Resaltó que a pesar del impacto que puede tener esta compra en el sector de energía y en la macroeconomía, la misma se hizo sin haber consultado el FMI ni a los bancos, Mundial (BM) e Interamericano de Desarrollo (BID).

Marranzini consideró que esto es parte de los elementos que estarían incidiendo en el retraso de las negociaciones del FMI con el gobierno, para la reanudación del acuerdo stand by.

Expresó también que a los empresarios les preocupa mucho que para tratar de mantener la estabilidad, el Banco Central siga emitiendo más certificados de inversión, con lo que va restringiendo mucho más la economía.

De esta manera, según explicó, el Banco Central seguirá creando un problema mayor a los sectores productivos y comerciales.

Con relación a los últimos planteamientos de las iglesias y otros sectores, de que el país no anda por la vía correcta en el manejo de los asuntos económicos, Marranzini exhortó al gobierno a poner atención a esos llamados de alerta.

Consideró, además, que el gobierno debe atender estos llamados a los fines de tratar de que la economía del país no siga deteriorándose.