En el contexto de los niños pobres o violentados en su dignidad cuando tienen que salir a las calles a buscar parte del sustento familiar, los siquiatras César Mella y Secundino Palacios coincidieron en que esa realidad representa una carga de violencia con consecuencias futuras.
Se refirieron a los niños y adolescentes que, inclusive en horas de la noche y la madrugada, se dedican a vender en las calles de las principales ciudades.
Las claves
1. Vendedores
Las principales avenidas de Santo Domingo acogen a decenas de niños y adolescentes que se ven expuestos a toda clase de abusos.
2. Controles ausentes
El rol de las autoridades está casi ausente.