Dadme una vocación y yo os devolveré una escuela, un método y una pedagogía. San Pedro Poveda, 1912.
Ante la crisis que vive hoy la educación dominicana, (sería) es conveniente evocar esta significativa frase del maestro don Pedro Poveda, nacido en Linares España (1874-1936), canonizado en el 2003 como mártir.
Es obvio que nuestro sistema educativo al mismo tiempo que lucha por lograr un mejor presupuesto (4, 6, 10%), necesita reformas profundas y la primera, en mi opinión, debe realizarse al interior de cada uno de los maestros y maestras que están en contacto directos con los y las estudiantes. Nuestros docentes necesitan redescubrir su vocación, revalorar su tarea de educar, hacer conciencia de que su función no es tan sólo enseñar a leer, sumar o restar; están contribuyendo a formar nuevas vidas, nuevas conciencias ciudadanas. Y en esta hermosa tarea hay que poner el alma.
Esta experiencia la estamos viviendo en la Regional 10 de Educación, desde hace tres años. Es un proyecto de Cogestión entre el Ministerio de Educación y el Centro Cultural Poveda, el cual inició en el 2008. Las personas involucradas en este proceso hemos visto con satisfacción Que algo nuevo está pasando en esta Regional, una de las más densamente pobladas y empobrecidas del país (incluye los municipios Santo Domingo Norte y Santo Domingo Este).
El espíritu de esa frase poderosa de San Pedro Poveda se está haciendo realidad, ya que miles de docentes han iniciado un proceso de revaloración de su quehacer educativo y han asumido el compromiso de mejorar la calidad educativa en sus aulas. Como resultado de este proceso encontramos hoy técnicos y directivos comprometidos con el cambio, maestras y maestros actualizados y entusiasmados, madres y padres integrados, aulas innovadas y estudiantes participando activamente en su proceso de aprendizaje. Se han construido verdaderas Comunidades de Aprendizaje, demostrando que con un mayor compromiso, un poco de esfuerzo y una chispa de amor de todos y todas sí se puede.
Traemos a colación este tema en el marco de la celebración del centenario de la presencia de la Institución Teresiana en el mundo, fundada por San Pedro Poveda en 1911. Sus miembros llegaron a la República Dominicana en 1954 para dedicarse a la formación de maestras y maestros en las escuelas normales Félix Evaristo Mejía, Emilio Prud-Honne, Luis Napoleón Núñez Molina y Juan Vicente Moscoso. Hoy continúan realizando su obra en el Centro Cultural Poveda, en la gestión de la Regional 10 de Educación, en la gestión y docencia directa de distintos centros educativos públicos y privados, así como en varias universidades, centros de salud y organizaciones comunitarias. La Institución Teresiana ha demostrado en todos estos años que es posible hermanar la Fe, la Ciencia y la Cultura, que era objetivo fundamental para su fundador Pedro Poveda.
Con motivo del centenario, la Institución Teresiana ha organizado diferentes actividades, una de las más significativas es la celebración solemne de la eucaristía el domingo 4 de diciembre, en la Catedral de Santo Domingo. La misma será concelebrada por varios sacerdotes amigos de la Institución Teresiana y presidida por Su Eminencia Reverendísima Cardenal Nicolás López Rodríguez. Allí esperamos congregar a miembros, egresadas/os, familiares y allegados de la institución.