POR CARMEN HEREDIA DE GUERRERO
Con el sugestivo nombre de “Solo Mozart”, se privilegia la música del más grande músico austríaco, Wolfang Amadeus Mozart, en el segundo concierto del Festival Musical de Santo Domingo a cargo de la Orquesta de Cámara del Festival dirigida por Philippe Entremont y en el que participan como solistas Ludwig Müller, violín y Caroline Harrison, viola. Esta noche está dedicada al Grupo ABRISA.

PROGRAMA OBERTURA DE “DON GIOVANNI”

La Opera Don Giovanni estrenada en Praga en 1787, obtuvo un éxito inmediato, el que se  ha mantenido a través del tiempo no sólo por la belleza musical, sino además, por su atractivo argumento basado en la obra de teatro “El Burlador  de Sevilla” del dramaturgo español Tirso de Molina, creador del mito del “Don Juan”, famoso libertino seductor de mujeres. El magnífico libreto de Lorenzo Da Ponte, que recoge las aventuras del mítico personaje, entusiasmó a Mozart llevándolo a componer una de sus óperas más representativas. En un pincipio, Mozart inició esta obra como ópera bufa, dadas las características picarezcas del argumento, pero las contingencias dramáticas del libreto de Da Ponte, hizo que  hiciera con su música algo más grandioso.

La famosa Obertura escrita por Mozart 24 horas antes de su estreno, inicia con la solemne música de la escena del banquete, en la que se le aparece a Don Juan, la estatua de piedra del comendador;  le sigue un movimiento alegre en el que la música y el ritmo exponen las características del atrevido y festivo Don Juan.

SINFONIA CONCERTANTE PARA VIOLIN, VIOLA Y ORQUESTA

Violín: Ludwig Müller

Viola: Caroline Harrison

Escrita en el otoño de 1779, esta obra genialísima es una síntesis insuperable de los principios de sinfonía y concierto. La obra tiene tres movimientos: allegro maestuoso, andante y presto. Ninguno de los tres cuenta con temas de excepción, pero el desarrollo los convierte en un torrente ininterrumpido de bellísima música. El “Andante” es un maravilloso diálogo musical entre el violín y la viola, cargado de sentimientos de melancolía, que reflejan el estado de ánimo en que se encontraba Mozart al escribir esta obra.

SINFONIA NO. 41 EN DO MENOR “JUPITER”

Nadie sabe a ciencia cierta quién inventó el nombre de “Júpiter” para ésta, la última sinfonía de Mozart. Se le atribuye a Johann Baptist Cramer, uno de los más brillantes pianistas de su tiempo, quien dio el sobrenombre para  señalar su “perfección divina”. Con este sobrenombre aparece por primera vez en un programa de la Real Filarmónica de Londres, años después de la muerte del compositor. Esta obra es una de las grandes pruebas para un director de orquesta, requiere superioridad humana y musical. Desmiente la ingenua idea de la “facilidad” de Mozart para las orquestas.

En “Júpiter” dos temas dominan el primer tiempo, el primero es viril, fuerte, optimista, masculino. El segundo es gracioso, femenino, suave, dulce. Con estos dos temas Mozart compone un tiempo de sinfonía sencillamente perfecto. El segundo movimiento “Andante cantabile” es admirable, combina el lirismo con acentos dramáticos. El tercer movimiento “Menuetto allegretto” es de carácter gracioso y se establece un juego entre las cuerdas y los instrumentos de viento. El cuarto movimiento “Molto allegro” podría justificar la denominación de “Júpiter”. Aquí Mozart como un dios, maneja a su libre albedrío astros y constelaciones en la inmensidad del Universo. La grandiosidad de este movimiento comprende el magnífico tejido polifónico, el juego de voces y temas, y la  maestría técnica que alcanza su nivel más alto: aquel en que se hace invisible. Este movimiento combina la fuga y la sonata.

LUDWIG MÜELLER

Nacido en  Austria, desde 1986 es concertino de la Orquesta de Cámara de Viena y desde 1991 concertino de la Orquesta de Cadaqués. Como solista y director artístico de ambas orquestas, ha actuado en las principales salas de conciertos del mundo, y ha realizado numerosas grabaciones. Es invitado regular como concertino de orquestas tales como la Sinfónica de la BBC de Londres, Filarmónica de Cámara Alemana de Bremen, Orquesta de Castilla y León, y ha sido concertino de la Orquesta Suerwold, formada por miembros de las mejores orquestas internacionales, en su gira anual en el Año de Mozart.

CAROLINE HARRISON

Estudió viola en la Royal Academy of Music de Londres y música de cámara con Sydney Griller. En 1988, Carolina se convirtió en Principal Asociado de Viola de la Royal Philarmonic de Liverpool, y ese mismo año se unió a la Orquesta Sinfónica de la BBC, en donde ocupa desde 1990 la posición de Sub-principal de viola. Es invitada regular de la Orquesta Superwold en Japón.