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La presidenta argentina, Cristina Fernández, exigió ayer la renuncia del jefe del Banco Central por negarse a usar reservas para pagar deuda externa, pero el funcionario rechazó el pedido desatando una crisis que podría enturbiar la vuelta del país al mercado de capitales.
La tensión política comenzó a mediados de diciembre, cuando el Gobierno ordenó a la entidad que le transfiera miles de millones de dólares para garantizar este año la capacidad de pago del Estado y tranquilizar a los inversionistas, de cara a una operación que lanzará a fin de enero para canjear 20.000 millones de dólares en bonos incumplidos.
Pero, Redrado, un funcionario respetado por inversores que desconfían de un Gobierno con tintes populistas, frenó el traspaso de los 6.600 millones de dólares pedidos por el Gobierno, esperando la opinión del Congreso y la Justicia.
La solicitud de renuncia provocó una presión bajista sobre el peso mayorista, que caía un 0,13 pct a 3,805 hacia las 1600 GMT, y el informal, que perdía un 0,39 pct a 3,875 por dólar.
El riesgo país argentino, medido por la banca de inversión JP Morgan subía 12 puntos, a contramano de la tendencia de los títulos de los mercados emergentes.
El ministro de Economía, Amado Boudou, dijo que para el Gobierno Redrado ya está fuera de funciones porque en el pasado había puesto su renuncia a disposición y que ahora había sido aceptada.
«Redrado ha llevado adelante funciones en el banco central y hoy ha terminado esa función», dijo tajantemente Boudou.
El funcionario agregó que el economista Mario Blejer, un ex titular del Banco Central con un largo curriculum que incluye dos décadas como funcionario del Fondo Monetaria Internacional (FMI) , asumirá el cargo «al momento en que se produzca la vacante».
Pero, una fuente del Banco Central dijo a Reuters que de acuerdo con la Constitución, «debe intervenir el Congreso de la Nación y Redrado no va a renunciar».
Se informó también que las reservas del Banco Central rondan los 48.000 millones de dólares.
Partidos opositores
Ya habían presionado a Redrado en las últimas semanas para que no libere los fondos sin la aprobación del Congreso, ya que esa decisión vulneraba la autonomía de la entidad financiera; y anticiparon que, de hacerlo, su titular podría enfrentar procesos judiciales.
Argentina
Argentina quedó aislada de los mercados internacionales de deuda desde que se declaró en default hace ocho años.
