LA HABANA, Cuba. El presidente Danilo Medina exigió ayer respeto para el país en cuanto al criterio establecido para obtener la nacionalidad, tras advertir de manera categórica que no acepta “que nadie, ni chiquito ni grande, atente contra la soberanía de la República Dominicana” y los acuse de racista, discriminador y violador de los derechos humanos.

El planteamiento fue hecho en respuesta a pronunciamientos del Caricom y en especial del ministro de San Vicente y Las Granadinas, Ralph Gonsalves, quien criticó la sentencia 168/13 del Tribunal Constitucional, y al que dijo que llegó muy lejos. “No se le ha quitado la nacionalidad a nadie, no puede quitársele a nadie lo que no tenía”, señaló Medina, quien explicó que el objetivo del fallo es regular la situación de miles de personas que “viven en un limbo”, respetando los derechos humanos.

Recordó que como Presidente de la República debe cumplir las decisiones del Tribunal Constitucional, por lo que la sentencia 168/13 debe ser ejecutada única y exclusivamente por las instituciones competentes de la nación. Al hablar en la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), dejó claro que la República Dominicana como Estado soberano tiene derecho a regular a las personas que viven de manera irregular, situación que establece la sentencia.