El presidente Leonel  Fernández asistió ayer al sepelio de su prima Digna Sofía Báez Reyna, realizado en el Cementerio Cristo Redentor, donde resaltó las virtudes de la extinta dama, a la que dijo recordará como una persona “alegre, servicial, entusiasta, hija abnegada, esposa  tierna y amorosa, como una hermana preocupada y solidaria”.

Visiblemente triste y con palabras entrecortadas, el Presidente Fernández dijo que su pariente  partió con la satisfacción de haber vivido para servir y cooperar con los demás.

“Su mayor deseo siempre era cómo cooperar y servir a los demás, para eso vivió, y hoy ya no la tendremos entre nosotros”, expresó el mandatario.

El presidente Fernández sostuvo que su pariente murió sin haber cumplido su ciclo de vida, anticipadamente, “lo aceptamos por que es una voluntad de Dios, pero nos resistamos a creerlo”.  Fernández agradeció el respaldo ofrecido por familiares, amigos y allegados a la familia Reyna-Eusebio  ante la perdida de un ser querido.