El presidente Leonel Fernández calificó ayer de ilegal y antidemocrática la forma como  el Congreso de Paraguay sustituyó de la Presidencia de la República a  Fernando Lugo.

 Fernández condenó de manera enérgica   el mecanismo utilizado  por el Congreso de Paraguay.

Un comunicado de prensa dado a conocer anoche  precisa que Fernández reclamó desde Brasil que el nuevo Gobierno no sea reconocido por la comunidad internacional.

Además,  solicitó que la Organización de  Estados Americanos (OEA) convoque inmediatamente una reunión general de cancilleres, a los fines de suspender al país sudamericano de los organismos regionales.

Precisó que lo ocurrido marca un retroceso en el respeto al Estado de derecho en América Latina, por lo que planteó que debe haber una acción colectiva de la comunidad internacional, a los fines de restituir al presidente Lugo en la Presidencia de Paraguay.

“Aunque  Lugo ha sido reemplazado por el vicepresidente, se trata de un Gobierno que carece de toda legalidad”, afirmó Fernández.

 Lugo fue destituido ayer bajo el alegato de mal desempeño, y el vicepresidente Federico Franco, del Partido Liberal, asumió.

Sus seguidores  afirman que ahora el país queda a merced de  los partidos derechistas Colorado y Liberal, aliados de la dictadura de Alfredo Stroessner.