QUITO.  AP. Las autoridades ecuatorianas solicitaron ayer a Colombia información sobre tres colombianos que fueron capturados en la víspera por supuestamente planear un atentado contra el presidente Rafael Correa, quien le restó importancia al hecho. 

Según la confesión judicial de los implicados a la que tuvo acceso la AP, dos de los colombianos admitieron tener vínculos con paramilitares pero no revelaron por quiénes habrían sido contratados.

Dijeron que el pago era por un millón y medio de dólares.

El ministro colombiano de Defensa, Juan Manuel Santos, declaró  que los sospechosos son narcotraficantes vinculados con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).  Uno de los agentes policiales que participó en la detención en Ecuador aseguró que según el testimonio de un informante colombiano, no detenido, y evidencias de planos y mapas, la operación se iba a realizar el 20 de junio.  Desde un cerro cercano al palacio de gobierno “se lanzaría un cohete a la plaza de la Independencia (aledaña a la casa de gobierno) para causar conmoción y para que la escolta saque al Presidente. En los hoteles… estarían francotiradores quienes acabarían con el Presidente”, dijo.