El presidente Danilo Medina oficializó la creación del Fondo de Asistencia Solidaria al Empleado (FASE) para apoyar de manera transitoria a los trabajadores formales del sector privado con una transferencia monetaria para contrarrestar los efectos económicos de las medidas adoptadas para frenar la propagación del coronavirus (COVID-19).
El programa FASE entregará al trabajador suspendido una suma mensual correspondiente al 70% del salario ordinario, la cual nunca será menor de RD$ 5,000 ni mayor de RD$ 8,500.
El fondo fue creado con el Decreto 142-20, donde también se especifica el origen de los recursos:
a) Recursos generados de las cotizaciones pasadas, utilidades o beneficios que se hayan acumulado en exceso de reservas técnicas en la administración del Seguro de Riesgos Laborales a la fecha de la entrada en vigencia de la Ley 397-19, del 30 de septiembre del 2019.
b) Cualquier otra fuente financiera que sea identificada para tales fines.
El artículo 3 del decreto establece que los beneficiarios serán empleados suspendidos, cuyas empresas se encuentren al día con sus obligaciones de pago con la Tesorería de la Seguridad Social (TSS) para el período de febrero del 2020.
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Quedarán exentos los empleados de empresas que tiene permiso para seguir operando como los supermercados, colmados, farmacias, empresas industriales, agroindustriales y alimentos. También empresas de agricultura, ganadería, pesca, de seguridad privada, explotación minera y de cantera, y almacenes de dispendio de alimentos, productos farmacéuticos y agroindustria. De igual modo, entran en la excepción los sectores financieros, administradores de fondos de pensiones, de riesgos laborales y sector seguros; multimedios, generadoras de energía, sector salud, universidades y telecomunicaciones.
Aunque la suspensión de un empleado exime al empleador de pagar el salario, el decreto presidencial insta a los empleados a pagar el aporte restante. Esta disposición contradice la intención inicial de que tanto el gobierno como las empresas completen el total del salario de los empleados.
Para las empresas manufactureras que continúan operando bajo un permiso del Ministerio de Trabajo, el gobierno aportará mensualmente un avance de salario por un monto de RD$ 5,000, para que el monto restante lo pague el empleador. Para acogerse a esa medida, la empresa no deberá suspender a ninguno de sus empleados.