El presidente de la Federación Internacional de Voleibol (FIVB),  Jizhong Wei, calificó de inhumano el atentado territorista en medio de un partido de voleibol en Pakistan y les hizo llegar las condolencias a todos los familiaes de los jugadores, técnicos, arbitros y los espectadores que fueron victimas de ese vil atentado que le quitó la vida a 96 deportistas.

«En nombre de la FIVB y de la familia mundial del voleibol queremos llevar nuestro más sentido pésame a los familiares de las victimas de este atentado que ha arrebatado la vida a más de 96 personas que presenciaban un juego de voleibol en un bajo techo en Pakistan», dijo Wei.

Un suicida con bomba en un vehículo utilitario deportivo explosionó ayer en Pakistan durante un partido de voleibol en el noroeste de Pakistán, matando a 96 personas de un pueblo que se ha opuesto a insurgentes de Al Qaeda, ligados a los talibanes, dijeron autoridades. Funcionarios policiales dijeron a Reuters que el atacante suicida condujo el coche y se inmoló en la cancha donde se jugaba un partido de voleibol, y en la que había ancianos y niños.

«Es simplemente un desastre. Puedo ver cuerpos y heridos por todos lados», dijo a Reuters por teléfono Fazl-e-Akbar, un testigo.

«Está oscuro. Están usando los faros de los vehículos para buscar a las víctimas», añadió. La explosión, cerca de Lakki Marwat, un pueblo que se opone a las actividades de los insurgentes talibanes, sucede el mismo día que se realizan protestas contra la violencia de extremistas vinculados a Al Qaeda en el país aliado de Estados Unidos.

El jefe de la policía local Ayub Khan dijo que el atacante suicida se inmoló en el todoterreno en el centro de la cancha y se cree que un segundo vehículo se dio a la fuga. «Hemos removido todos los cadáveres y a todos los heridos de entre los escombros», dijo Khan por teléfono a Reuters, quien añadió que la cuenta de fallecidos llegaba a 88.

Muchas personas quedaron bajo los escombros de viviendas aledañas.

Khalid Israr, un funcionario regional que habló por teléfono desde un hospital en el que se atendían heridos de la explosión, dijo que varios testigos recordaron haber visto al suicida conducir un vehículo en dirección a la cancha y hacerse explosionar, durante el partido de voleibol,  con gran asistencia. 

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Bajo fuego

La capital comercial de Pakistán virtualmente dejó de operar el viernes ante el llamado de líderes políticos y religiosos a una huelga para protestar en contra de la violencia, luego de que un suicida con bomba dejó 43 muertos en una procesión de fieles esta semana. Los talibanés se atribuyeron la responsabilidad por el ataque suicida del lunes durante la procesión religiosa en el momento culminante de la Ashura, uno de los eventos más importantes del calendario musulmán chiíta. Además amenazaron con más matanzas. La posibilidad de mayor violencia llega en un duro momento para el presidente.