El presidente haitiano, Jovenel Moise, reiteró ayer que el diálogo es la vía más expedita para enfrentar los problemas del país, mientras centenares de opositores exigían ayer en las calles la renuncia del gobernante. Al menos cuatro personas resultaron heridas de bala. Los afectados fueron un periodista local, un policía y dos manifestantes
El presidente volvió a pedir unidad a los sectores con incidencia en la nación. “Las reformas que se llevarán a cabo serán inclusivas; la diáspora tendrá que desempeñar su papel en todos los sectores”.
“La Justicia y la Policía están trabajando para frenar la inseguridad. Estamos trabajando para devolver la paz y la serenidad a las familias haitianas”, dijo Moise. Moise felicitó la “profesionalidad” de la Policía Nacional, al considerar que la institución “no se deja atrapar por las provocaciones».
Admitió que las condiciones de vida de la población son precarias y manifestó su decisión de iniciar reformas para cambiar las cosas. “El sistema de explotación está llegando a su fin. Ella hace todo para regenerarse, pero debemos unirnos para evitarlo. La unidad entre los de arriba y los de abajo. Solo hay una manera de resolver el problema y es a través del diálogo”, opinó.
Al reconocer que la pobreza e inseguridad reinan en el país, Moise afirmó que la violencia política y la persecución “no son parte de nuestro vocabulario». Asimismo, volvió a arremeter contra el “sistema de explotación» que ha denunciado como causante de los problema del país.