El presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Román Jáquez, reiteró este miércoles el compromiso del pleno quedar bien con la sociedad dominicana ante el compromiso asumido por la confianza depositada en el organismo por la sociedad dominicana.

«Sabemos que es al final cuando cualquier voto de confianza se valida, por lo que esta Junta Central Electoral, su pleno, reitera el compromiso de quedar bien, un compromiso que se sella con la sangre de nuestra dignidad», dijo el presidente del organismo.

Jáquez se refirió en estos términos durante la celebración del aniversario número 100 del organismo en el que destacó que la la entidad ha logrado la confianza de organismos internacionales, además de ser el «Primero y único» organismo comicial en lograr cuatro importantes certificaciones que son: la ISO 9001 sobre sistemas de gestión de calidad; ISO/TS 54001 sobre sistemas de gestión de la calidad electoral; ISO/IEC 27001 sobre sistemas de seguridad de la información y la ISO 22301 sobre sistemas de gestión de continuidad de operación.

Leer más: Conozca la propuesta de diputado dominicano para evitar feminicidios

La JCE

Además, el presidente de la JCE destacó que propuso a la República Dominicana para la presidencia pro tempore de de la Unión Interamericana de Organismos Electorales (UNIORE), resultando acogida su propuesta en 2019 con el apoyo de 20 de los 28 países que componen el organismo internacional.

Jáquez destacó que «Para la Junta Central Electoral las organizaciones políticas, sin importar su alcance electoral, son importantes para el sostenimiento de nuestra democracia, por varias razones».

Entre estas mencionó la representación que aporta la JCE; el acceso a la participación ciudadana y la estabilidad y gobernabilidad que ofrece el organismo comicial.

«En resumen, tener un sistema de partidos políticos fuerte es esencial para garantizar la representación equilibrada, la estabilidad política, la fiscalización y la participación ciudadana en la democracia. Un sistema de partidos políticos débil puede socavar estos valores democráticos fundamentales, afectar negativamente la calidad de la gobernanza y la participación ciudadana, peor aún, partidos débiles hacen surgir personajes que corroen sus entrañas y los sustituyen destruyendo la democracia», dijo Jáquez.