De un total de 48 meses que es el tiempo de un período presidencial, ya el presidente Danilo Medina ha agotado siete meses, y aún el país no ha percibido una iniciativa impactante que empiece a plasmar algo de lo que “nunca se ha hecho”.

Puede afirmarse que el presidente Medina fue categórico en relación a su posición frente a la  minera canadiense Barrica Gold y Bahía de las Aguilas, pero además de palabras, esos casos está por verse como concluyen.

Una encuesta del Centro Económico del Cibao divulgada por Listín Diario el día dos de este mes de abril endosa al presidente Medina un 89% que entiende excelente su gestión, y una gestión excelente se mide por resultados,  no por emociones ni apreciaciones subjetivistas. No por amagar, sino por pegar.

La sección Radar de El Nacional del día dos de este mes de abril cuestiona que los 137 viceministros que en parte del gran desorden que accionó el presidente Leonel Fernández para caotizar al país en varios renglones, control de armas, seguridad, servicio exterior, haitianización, tránsito vehicular, el presidente Medina en vez de cesantearlos, los reubicó como asesores.

Así acontece con el servicio exterior, no solamente por el excedente censurable de su ociosa nómina, sino por que un gran por ciento de éstos residen en el país y cobran aquí en dólares y en lo primero el presidente Fernández es el culpable pero en lo segundo es el canciller que  no procede a recomendar cancelaciones por un robo descarado al erario.