Hoy 
El presidente Danilo Medina deploró ayer las condiciones en que se encuentra el hospital Luis Eduardo Aybar, a donde llegó ayer de manera sorpresiva para comprobar, con sus propios ojos, las informaciones que tenía de que operaba de manera precaria.
Yo he podido constatar las condiciones en que está operando este hospital y esto no puede seguir, expresó el mandatario tras concluir el recorrido por el centro hospitalario.
Dijo que ese centro debe ser transformado con una inversión cuantiosa para ponerlo a nivel de la condición de vida de la gente que lo utiliza.
Ustedes han podido ver igual que yo que es un hospital que se encuentra en condiciones infrahumanas para seguir operando. Hasta cinco mujeres parturientas en una misma cama y eso no puede seguir, expresó Medina alarmado.
Explicó que en 2013 incluyeron una partida para remodelar ese centro de salud, aunque no precisó de cuánto sería.
Dijo que el hospital debe ser ampliado y mejorado y que se debe cambiar una buena parte de los equipos médicos y de las camas.
Al recorrido sorpresa el mandatario acudió acompañado del ministro de Salud, Freddy Hidalgo Núñez, y del director de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe), Miguel Pimentel Kareh, con quienes supervisó diferentes áreas del hospital.
Sorpresa y revuelo. Medina salió del Palacio Nacional alrededor de las 11:00 de la mañana sin que se informara el lugar al cual se dirigía. Momentos después se supo, fuera de la casa de Gobierno, que el mandatario se dirigía al hospital.
La llegada del mandatario provocó gran algarabía entre pacientes y el personal que allí labora y no faltó el sonado Danilo e de lo mío, que sonó a lo largo de la campaña electoral.
Todos querían acercarse a entregar papelitos improvisados, a saludarle o dejarse ver del presidente, sobre todo, los nativos de San Juan, que gritaban orgullosos su origen.
Medina hacía el esfuerzo por atender a los que lograban acercarse y los escuchaba. A algunos conocidos les dijo que fueran al Palacio y a otros le tomó los escritos que le pasaron.
Zoom
Apretujones
La estrechez de los pasillos del hospital provocó que periodistas, funcionarios, y pacientes se apretujaran con el paso del mandatario. Del empujadero no se salvó ni el ministro de Salud, quien en un momento se confundió entre el grupo que trataba de moverse entre la carencia de espacio y el calor de la multitud.
