El presidente Danilo Medina visitó ayer comunidades afectadas por los torrenciales aguaceros de los últimos días en Azua y San José de Ocoa, donde dispuso la distribución de alimentos, medicina, la reparación de infraestructuras dañadas y la entrega de otras facilidades.
El mandatario llegó a Sabana Larga, en San José de Ocoa en un helicóptero cerca de las 8:00 a.m., donde Carlos Castillo, senador de esa provincia le explicó la magnitud de los daños que incluyen varias comunidades incomunicadas y a decenas de desplazados.
Al caminar por la zona fue rodeado por decenas de personas, entre estas mujeres, niños y ancianos que les hicieron peticiones, reclamos y manifestaciones de apoyo a su candidatura.
“Gracias por venir Presidente”, vociferó una señora. El gobernante mandó a reparar los daños y especificó que se deben evitar cometer vicios de construcción, para que no se dañen de nuevo.
Lo acompañaron los ministros Administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta; de Obras Públicas, Gonzalo Castillo y de Agricultura, Ángel Estévez; los directores de la Oficina Supervisora de Obras del Estado, Francisco Pagán; del Plan Social de la Presidencia, César Prieto y los senadores Rafael Calderón y Carlos Castillo.
Fue al puente del Limonal, Los Curíos, en Sabana Larga, donde observó el estado en el que quedó la estructura y ordenó su reparación. Sobrevoló la provincia para conocer la magnitud de los efectos provocados por las lluvias.
Tras evaluar los daños y oír los reclamos de la gente, el presidente Medina impartió instrucciones para la solución en cada caso.

Ayer el Plan de Asistencia Social de la Presidencia envió comida cruda y enlatados, sábanas, mosquiteros y colchonetas a familias afectadas en comunidades de las provincias bajo alerta y más afectadas, entre estas Azua, Elías Piña, Barahona, Montecristi y Peravia.
El ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo designó una comisión que irá a evaluar los daños, para proceder a la reparación o reconstrucción. Afirmó que vigilarán y se tomarán las medidas necesarias para que no se dañen cuando empiecen las lluvias nuevamente.