Tras el escándalo y rechazo que generó en la opinión pública la pensión por RD$651,000 a favor del exsuperintendente de Bancos y actual contralor general de la República, Haivanjoe Ng Cortiñas, éste anunció ayer que renunciaba inmediatamente a ese beneficio.
Ng Cortiñas hizo el anuncio durante una breve conferencia de prensa en la que leyó una carta de un párrafo enviada al superintendente de Bancos, Rafael Camilo, en la que anuncia su declinatoria a la pensión. No permitió preguntas de los reporteros.
Luego de extenderle un cordial saludo, es propicia la ocasión para expresarle que a los seres humanos se nos presentan circunstancias y oportunidades, las que uno elige o declina, es por ello que esta vez he decidido renunciar inmediatamente a la pensión otorgada por la Superintendencia de Bancos, amparada en el Reglamento de Pensiones de ese organismo, dice la carta a Camilo, fechada de ayer.
Ng Cortiñas estuvo puntual en la conferencia de prensa, pautada para las 11:00 de la mañana, y a los reporteros que llegaron minutos después no se les permitió acceder al salón de conferencias de la Contraloría, lo que los molestó. Previo al anuncio, Ng Cortiñas fue visto en los pasillos del Palacio a tempranas horas de la mañana.
El escándalo. El miércoles el diputado Francisco Matos dio a conocer la pensión de Ng Cortiñas, aprobada el 17 de agosto.
De inmediato las reacciones no se hicieron esperar y senadores oficialistas calificaron de irritante la pensión y pidieron al presidente Danilo Medina revocarla.
De su lado, Ng Cortiñas se defendió alegando que su pensión fue aprobada por un comité, que la cobrará dentro de un año y que para entonces prescindirá de su sueldo.
Indicó, además, que la pensión fue aprobada en base a un plan complementario del Fondo de Pensiones de la Superintendencia de Bancos y al que aportó el monto de RD$6,000,000 de manera retroactiva.
La pensión otorgada equivalía al 80 por ciento de los RD$899,000 del salario actual del superintendente de Bancos.
Reglamento. De acuerdo con una publicación de la periodista Senabri Silvestre, del periódico El Día, Ng Cortiñas fue quien elaboró el reglamento del Plan Complementario de Pensiones y Jubilaciones para empleados de esa entidad.
La normativa fue aprobada por la Junta Monetaria hace apenas un año, dada la insistencia del funcionario, expresada mediante comunicaciones intercambiadas con el gobernador del Banco Central, la Junta Monetaria y la Superintendencia de Pensiones desde el 20 de mayo de 2010.
El reglamento señala que podrán optar por una Jubilación Privilegiada, Normal, Normal Ejecutiva, por Discapacidad, Optativa y Prematura, los empleados que tengan un mínimo de 30, 25, 20, 10 y 5 años laborando en la Superintendencia de Bancos, además del cumplimiento de otros requisitos, entre ellos la edad y la sumatoria de todo el tiempo que haya laborado en otras entidades del Estado.
Sin embargo, el documento promovido por Ng Cortiñas (quien apenas tenía tres años en ese organismo) establece en su artículo 42, párrafo II, que un funcionario que tenga la categoría de Autoridad en la Superintendencia y haya desempeñado posiciones de designación por decreto del Presidente podrá computar ese tiempo como años de servicio en la Superintendencia.
Es decir, que el superintendente de Bancos puede usar para pensionarse los años que haya trabajado en otras entidades, como ministro, viceministro, miembro de la Junta Monetaria, director general u otro cargo similar, en instituciones autónomas, centralizadas y descentralizadas.
Ese beneficio puede ser utilizado por los funcionarios con categoría de Autoridad, para optar por la Pensión Normal Ejecutiva, cuyo monto no podrá ser menor al 60% del salario promedio devengado en los últimos seis meses en la institución, ni exceder el 80% del salario bruto percibido en el mismo período. Ese tipo de pensión será cubierta con recursos de la Superintendencia de Bancos hasta que el beneficiario cumpla la edad mínima requerida (60 años). Ng Cortiñas tiene 53 años.
Otros más. Junto a Ng Cortiñas fueron pensionados 48 empleados de la Superintendencia, algunos de los cuales siguen en la institución porque postergaron la pensión.
Entre los pensionados con mayores montos están Daris Javier Cuevas, con RD$437,369; Luis Andrés Montes de Oca, con RD$413,309; Atahualpa Pedro Domíngue,z con RD$ 317,364; José Lucrecio Núñez, RD$270,505; Jesús Castaños Bolquez, RD$166,129; Ramón Antonio Rodríguez, con RD$200,960; Julia Mercedes Quezada, con RD$134,896; Gregorio Manzueta, con RD$135,603; Altagracia Campusano, con RD$136,456; Lucía Antonio de Pérez, RD$135,049; María Villar de Jiménez, con RD$112,426; Eugenia del Carmen Rodríguez, con RD$176,817; Milagros Castillo, con RD$164,407; José Mora Gómez, RD$168,402; Luis Ramón Ogando, con RD$136,24; y Liselotte Canahuate, RD$115,786.
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Publicar pensiones
La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) planteó que el Gobierno debe informar sobre cuáles funcionarios que desempeñan cargos actualmente fueron pensionados en la administración anterior. Considera que si un servidor del Estado recibe una pensión no debe ganar un salario en otro cargo público o debe prescindir de uno de los dos beneficios.