El director general de Prisiones, Roberto Obando Prestol, afirmó ayer que a la cárcel de Najayo hombres intentan llevar pericos, perros, loros, monos y otros tipos de animales para ser usados como mascotas de algunos presos, pero que las autoridades impiden su ingreso porque el reglamento del recinto lo prohíbe.
El funcionario se expresó en esos términos al ser cuestionado en relación a la revelación hecha por un recluso de que en el área de conyugales de la cárcel de Najayo, un preso tiene un mono como parte de los privilegios de que goza.
En relación a las supuestas salidas de algunos presos de alto peligro, dijo que hasta donde tiene conocimiento todos los presos salen cumpliendo los requisitos de ley y a los asuntos que el reglamento indica.
Los inhibidores. Obando dijo que los inhibidores de señal que buscan instalar en los recintos para impedir el uso de teléfonos móviles, tienen un costo de alrededor de US$100 mil para los recintos pequeños y US$200 mil para los recintos de mayor capacidad de reos.
Indicó que debido a que no cuentan con el presupuesto para ello, solicitaron la colaboración al Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel) para realizar la instalación a la mayor brevedad.
Declaró que durante su gestión se han incautado unos 800 celulares de diferentes marcas que estaban en poder de reclusos.
Explicó que los operativos se seguirán realizando en todas las cárceles, en procura de los teléfonos móviles.
Robo de terrenos. Prestol alertó a las autoridades de Azua sobre los planes de desaprensivos que pretenden crear asentamientos humanos en las inmediaciones de la cárcel de esa ciudad.
En rueda de prensa realizada en su despacho, reveló que recibió informaciones que fueron confirmadas que grupos de personas querían construir viviendas en los alrededores del penal. Llamó a las personas involucradas en el plan para que lo cesen, y dijo que ya las autoridades locales fueron notificadas al respecto.