Las pequeñas y medianas empresas constituyen la mayoría del país, pero están en desventaja frente al reducido porcentaje de las grandes porque no califican para créditos bancarios. La razón está, según el dirigente empresarial Ignacio Méndez, en que no pueden cumplir con los exigentes requisitos impuestos por las normas prudenciales establecidas.

Ahora se da el caso de que los bancos prestan a tasas de interés bajas, pero el escenario no favorece a las pequeñas y medianas empresas. Méndez pide al Gobierno buscar una salida a esta situación para que estas empresas, que sitúa en el 96% del total, puedan dedicarse a producir bienes y riquezas. Concretamente, sugirió la creación de un fondo de garantías a favor de las medianas y pequeñas empresas.

El presidente de la Federación  de Asociaciones Industriales (FAI), Ignacio Méndez, dijo ayer que las facilidades de préstamos con bajas tasas de interés que tienen disponibles los bancos en estos momentos,  no están al alcance de las pequeñas y medianas empresas (pymes) locales debido a  las exigencias de las normas prudenciales existentes.

Sostuvo que esta situación afecta alrededor del 96% de las empresas del país, que son las pymes, el restante 4% son negocios grandes, cadenas de tiendas por ejemplo,  y no tienen problemas de crédito  porque cuentan con inmuebles con títulos  y maquinarias suficientes en buenas condiciones que son aceptadas en garantías.

Dijo que el grueso de los financiamientos de los bancos comerciales del país en estos momentos son préstamos  al consumo, tales como préstamos para vehículos, casas y personales.

 Méndez, en declaraciones a este diario, argumentó que para los bancos resulta más atractivo  financiar este tipo de  actividades, en vista de que  en caso de que el deudor no cumpla con  el pago y haya que  ejecutarles  propiedades le resulta más fácil  a la banca reventas carros y casas, en vez de  viejas maquinarias, que es lo que ofrecen  los empresarios pymes como aval de préstamos.

En la mayoría de los bancos comerciales hay campañas de oferta de tasas de interés a  alrededor de 10% para préstamos al consumo, entre ellos los denominados personales y financiamientos para  vehículos y viviendas.

Las  pymes, sin embargo no están teniendo acceso a ese tipo de financiamiento debido a las exigencias establecidas en las normas prudenciales. Los bienes de que disponen éstas para garantías, que son viejas máquinas, no califican como aval en los bancos, sostuvo.

 Manifestó que   hay que buscar una salida a la situación: determinar alguna estrategia de fomento de  financiamientos a las pymes, a fin de  poner el país a producir, a generar riquezas y  empleos. Sugirió que el Gobierno cree un fondo de garantía para las pymes.

Dijo que las instituciones   donde  tienen acceso a créditos es en entidades financieras con  tasas son de más de 30%.